"Cuando venga el Paráclito que yo les enviaré desde el Padre, el Espíritu de la Verdad que proviene del Padre, él dará testimonio de mí. Y ustedes también dan testimonio, porque están conmigo desde el principio. Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora. Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad, porque no hablará por sí mismo, sino que dirá lo que ha oído y les anunciará lo que irá sucediendo. El me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes. Todo lo que es del Padre es mío. Por eso les digo: "Recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes".
Palabra de Dios
P. Andrés Peirone Sacerdote Salesiano de Don Bosco
¡¡Feliz fiesta de Pentecostés!! ¡Feliz cumpleaños Iglesia! Hoy celebramos esta fiesta grande para la Iglesia, podríamos decir, el inicio de la Iglesia que en aquel día el Espíritu llenó de fuerza a todos los apóstoles y a todos los que creyeron en Jesús, y lo aceptaron recibiéndolo en el corazón con el bautismo.
Hoy es Pentecostés, hoy es un día hermoso para pensar y darle lugar en el corazón al Espíritu Santo, este gran desconocido quien es el que anima la Iglesia, la sostiene y la santifica, y muchas veces tan olvidado por nosotros. Sin el Espíritu Santo la Iglesia sería solo una institución, sin el Espíritu la liturgia sería un acto simbólico…un recuerdo de algo que pasó, sin vida.
Sin el Espíritu Santo la misión de la Iglesia sería solo propaganda. El Espíritu Santo es el que da vida, el que llena desde dentro la vida de los discípulos de Jesús, el Espíritu Santo es el que nos mantiene, es la fuerza del Padre y del HIjo, es el que sana nuestros corazones, el Espíritu Santo es el que viene -como dice la Palabra- soplando de los cuatro vientos y llena de vida los huesos resecos, es el que nos pone de pie.
Hoy es un día para decidirte a invocar al Espíritu Santo, decirle: "¡Espíritu Santo ven! ¡Vení y descendé sobre mi vida, Espíritu Santo cambiá mi corazón! ¡Espíritu Santo abrime a Jesús!! Amén.