Señor, que no me canse de pedirte que me sanes…
Tú sabes que pierdo las esperanzas en el camino, que los sueños se me olvidan, que los proyectos se abandonan, que las ilusiones se me mueren, que las relaciones se me rompen por desgaste, que a veces me invade tanto el cansancio, el miedo el agotamiento, la indiferencia, el desánimo…
Te pido me hagas consciente y responsable de todo eso que soy y lo que quiero, te ruego me enseñes y me des la gracia de "cargar con mi camilla y caminar" Que pueda estar atento y disponible para que cuando pases por mi lado, y me mires a los ojos pueda responderte cuando me preguntes: ¿Qué quieres? Amén.