Descubriendo Su Presencia

lunes, 9 de julio de
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Va a ser distinta mi posición frente a Dios, frente a Jesucristo, si yo recuerdo quién es Él como Dios y como hombre; si yo recuerdo quién es Él para mí. No sólo es un sabio, sino que además es mi Maestro; no sólo es un hombre muy bueno, sino que es mi Salvador; no sólo es un gran consejero; es mi Conductor, mi Guía; no sólo es un hombre muy fuerte; es mi apoyo, mi sostén; no sólo es un ser muy poderoso; es la fuente de todos mis bienes, los que tengo, los que espero, los que jamás podría soñar tener. Y no sólo es un hombre o un ser muy sabio; es Alguien que conoce mi vida en todos sus detalles; no sólo tiene un gran corazón, sino que actualmente está conmovido por todas mis indigencias, comparte todas mis aspiraciones más nobles, se duele de todos mis dolores, se alegra cordialmente con todas mis alegrías.
 
 
Es mi Dios. Es mi Salvador, mi Maestro. Es la vida divina que tengo dentro. Es el que me ha perdonado, en nombre del Padre Eterno también, cada vez que lo he ofendido. Es el que quiere darme fuerza, darme luz, orientarme, sostenerme, empujarme, para mi logro más completo en este mundo y mi felicidad más total en el más allá…


 
Padre Etcheverry Boneo
Siervo de Dios
 
 
Fuente: asc.org.ar
 

 

 

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