Ya a temprana edad, un poco mas de 9 años, es atraída por la novedad de la espiritualidad de la unidad de Chiara Lubich. Todo inició en un tren, al encontrarse con una joven de la misma edad que después sería una intima amiga. Escribió: “He descubierto el Evangelio. No era una cristiana autentica porque no vivía en profundidad, ahora quiero hacer de este magnífico Libro el único motivo de mi vida”.