En aquel tiempo, Jesús decía: "A qué se parece el reino de Dios? ¿A qué lo compararé? Se parece a un grano de mostaza que un hombre toma y siembra en un huerto; crece, se hace un arbusto y los pájaros anidan en sus ramas. Y añadió: A qué compararé el Reino de Dios? Se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina, hasta que todo fermenta".
Palabra de Dios
Monseñor Fernando Maletti | Obispo de la Diócesis de Bariloche
Queridos muchachos y chicas el evangelio de hoy LC 13,18-21 nos habla del reino de Dios y nos dice dos cosas: que el reino es como una semilla y que el reino se parece a un poco de levadura que una mujer mezcló con gran cantidad de harina. En los dos casos la realidad crece, crece, crece, crece hasta convertirse en algo muy importante. Así también nosotros estamos llamados a seguir sembrando la buena semilla o el grano de levadura en nuestro corazón, en el núcleo de nuestra vida familiar y en la realidad profunda de nuestra vida social, como ciudad, como pueblo y como país.
Para que pueda ir creciendo ¿Que semilla, que grano de levadura? Precisamente aquello que simboliza los valores del reino que, constantemente compiten con los antivalores que el mundo nos ofrece.
¿Qué nos ofrece el mundo? Ser egoísta, y también nos ofrece, a veces el "no te metás", y otras veces se nos viene con la violencia, o con la droga, con el alcohol o con el sexo sin amor.
Frente a todo esto el grano de levadura y también el grano de mostaza, es lo que hace transformar esta corriente que nos lleva al abismo, hacia una realidad de un árbol, que crece, que da frutos y que nos hace profundamente fecundos.Lo primero nos lleva al abismo, a la perdición, lo otro hace que seamos auténticamente felices.
¿Qué es feliz para Jesús, para Dios? Feliz significa Bienaventurado, es decir aquel que se realiza. Infeliz es aquel que se frustra, es aquel que pierde siempre, aunque aparentemente la pase bien y gane.Por eso seamos felices en el sentido de los valores del reino.
Que Dios los bendiga queridos muchachos y chicas y que tengan un muy buen día, en este final del mes de octubre y que bueno, mañana cuando sea el censo en todo el país, podamos encontrarnos también entre aquellos que anuncian a Jesucristo desde los pobres a todos, formando comunidades integradas en parroquias. Y también el censo nos encuentre como discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en Él tengan vida. Que sea mañana también un día para que muchos muchachos y chicas puedan dar testimonio de su fe y de su identidad pegada a los valores cristianos.
¡Que Dios los bendiga!