Martes 1º de Diciembre del 2020 – Evangelio según San Lucas 10,21-24

lunes, 30 de noviembre de
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En aquel momento Jesús se estremeció de gozo, movido por el Espíritu Santo, y dijo: “Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así lo has querido.

Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre, como nadie sabe quién es el Padre, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar”.

Después, volviéndose hacia sus discípulos, Jesús les dijo a ellos solos: “¡Felices los ojos que ven lo que ustedes ven!

¡Les aseguro que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que ustedes ven y no lo vieron, oír lo que ustedes oyen y no lo oyeron!”.

 

Palabra de Dios

Monseñor Ricardo Seirutti obispo auxiliar de Córdoba y Delegado Episcopal para la Pastoral de Juventud Argentina

 

¡Querida audiencia de Radio María! ¡Queridos chicas y chicos que están siguiendo esta transmisión!

Que lindo el tiempo estamos viviendo, el adviento. Ha comenzado este Domingo y hasta la navidad vamos a ir renovando en cada uno de nuestros corazones la espera del Señor. Espera que conocemos porque vino en la carne, por el vientre de María y el Espíritu Santo y espera que también nos llena de esperanza porque un día ha de volver.

¡El Señor nos invita a esperarlo, vigilantes, atentos! Y fíjense, esta primer semana y este primer Martes de adviento, un texto de Lucas, donde Jesús por el regreso de la misión de los 72 discípulos que ha enviado el mismo, vuelven. Es tal la alegría de Jesús de habernos visto evangelizar y todas aquellas cosas que ellos mismos cuentan, qué dice: “Jesús se estremeció de gozo, movido por el Espíritu Santo y dijo: «Te alabo, Padre […]». “

Pensaba en los discípulos estos que están mirando a Jesús alabar al Padre ¿no? y ¿que dirían? ¿que sentían? ¿ no? Y de hecho, Jesús va a terminar este “trozo” del evangelio diciendo: “¡Felices los ojos que ven lo que ustedes ven!”. Dice: “muchos profetas y reyes desearon esto y ustedes lo están viendo!” ¿no?

La alegría de Jesús, vista por los discípulos, ¡porque han evangelizado! Y él dice: “felices”, proclama una bienaventuranza: “felices por lo que ven”. Eellos son los que ven! ¡Que maravilloso!

 Tiempo de adviento, tiempo de espera, pero también tiempo de alabanza, oración de Kerigma y de anuncio. Todas estas actitudes desde mi corazón que hace que Jesús alabe, y hacen que yo vea “alabar al Padre a Jesús”.

Que lindo revisar este día ¿como está presente en mi corazón la evangelización? El anuncio del Kerigma, el anuncio de que Jesús está vivo entre nosotros, que murió y resucitó para salvarnos del pecado de la muerte y que habiendo ascendido al cielo permanece con nosotros, pero a su vez está viniendo para reencontrarse y llevarnos con Él. ¿Cómo anda, mi anuncio del evangelio en estos días?¿como anda?

Y seguramente que “algo voy a descubrir” por ahí, ando en una misión grande, por ahí ando en una misión muy pequeñita ¡eh! ¡Todo hace que Jesús alabe al Padre! Y en esa misión, en ese anuncio del evangelio, es donde yo voy viendo a Jesús que se alegra. ¡Que Dios los bendiga!