Carta para mi Padre Celestial

Soy humano y el me conoce, con eso me basta
Para sus hijos un cobarde tapando el fracaso con la felicidad
Para mi, ¡un milagro de papá!…
Siempre que creían saber quien soy, no lo era
Puedo creerme pero el es quien crea
voy a creerle aunque la gente no quiera
prospero, terco, bruto y sensible con el corazón de mamá
Visible ante la multitud pensante y liviano
cual brisa en la tempestad, ¡Muerto Jamas!
Floresco donde pudo haber muerte
vivo donde nadie creía, si fuera yo solo tendría miedo
pero miro atento, porque todo esta escrito en el viento 

Pueden nombrar mis cualidades como un niño aprendiendo a contar
Sabiendo que se puede errar cuando se empezo a intentar
sabiendo que cuando aprendi a amar aprendi a perdonar
no puedo parar el viento pero si mis pensamientos
pero no dejo infinito el momento, moriría en lamentos…
aunque vivo contento, para el seré eterno
Podría hablar de mi durante mil noches
escuchando comentarios de gente que cree que me conoce
en mayores o menores sentidos puede que si 
pero solo el que da el regalo sabe la verdad, en fin…

Sabiendo lo que esta bien y lo que esta mal
No me canso de errar una y otra vez mas ,
podría contar mis caídas en una lista sin final
caerme, llorar y volverme a levantar y seguir mi caminar
Pero seria en vano, el no me dejaría nunca de amar
Aveces escalo montañas buscando ¿inútil sera mi esfuerzo?
A medida que escalo el dolor se hace mas intenso
Cansado destruido vuelvo y en su amor rezo
sabiendo mis faltas y de lo que yo mismo me avergüenzo
pero el me levanta y se enorgullece verme mientras crezco

Carta para mi padre Celestial

 

Damian Benedetti