La promesa de Dios

martes, 19 de diciembre de
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Tu recibes la Delicadeza de Mi Padre.
Tu recibes la Promesa del Hijo.
Tu recibes la Luz del Padre y del Hijo.
Delicadeza del Padre para Su elegida.
Promesa del Hijo que quiere unirte a El en la intimidad de los esponsales.
Luz del Padre y del Hijo que quieren que seas transparencia celestial del Amor en el mundo.
Lo que viene del mundo, no es para ti, florecita Mia. Unicamente, se te pide las alegrias del Amor- sacrificio . Tu has adquirido el privilegio de pedir y de recibir. Conozco tus deseos.

Pide, recibiras. No temas pedir. La unión te da este derecho. 

Tienes Mi Promesa.

Los esponsales se celebrarán en el Cielo en la alegría.

Entonces, te pondre en el dedo el anillo nupcial y recibiras la corona, conseguida por tu fidelidad , tu renuncia, tu sufrimiento aceptado con amor, la sumision de tu voluntad a la Mia, tus sacrificios al servicio del Amor Misericordioso y el sentido de los demás que ha dominado tu vida en Mi.

 

Ana Tomicich