Quién eres Tú, que siendo Rey,
Permaneces como el más humilde
Servidor.
Quién eres Tú, que siendo Dueño del
Campo,
Te lanzas a sembrar,
Semillas colmadas de tu amor.
Quién eres Tú, que siendo el
Todopoderoso,
Suavizas el dolor de quienes sufren a tu
Alrededor,
Pero no apartas de Ti, los días más
amargos.
Quién eres Tú, que siendo el Gran
Predicador,
En silencio y sin palabras, con tan solo,
una mirada.
Te adueñas de nuestras almas.
Quién eres Tú, que siendo el Maestro de
Maestros,
Nos invitas a nosotros, tus discípulos,
A alzar juntos la voz para anunciar tus
Enseñanzas.
¡De una vez y para siempre,
Dime quién eres Tú, Jesús de Nazaret!
Escucha bien y guárdalo en tu corazón.
Soy tu camino y quien te anima a
recorrerlo.
Soy tu verdad y quien te impulsa a
buscarla.
Soy tu vida y quien en ti habita.
Soy tu enamorado y quien muere
de amor porque le ames.
Yo Soy, Soy el que Soy.
Soy quien te ruega que traspases
cualquier frontera dándole alas al Amor
y la Reparación.
Ranea, Sofía.