Con María, nuestra Madre de Luján

miércoles, 10 de julio de
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Con María, nuestra Madre de Luján, abrimos nuestras manos para dar y nuestros brazos para abrazar nuestra querida Patria.

Argentina, tierra rica y tan necesitada, abrí tu corazón a María, que Ella como Madre pueda guiarte hacia la libertad plena y perfecta de los hijos de Dios.

Que la Independencia de nuestra Nación sea realidad en cada persona que sobre este suelo habita. Que del norte al sur, del este al oeste de nuestra Patria, la vida sea respetada bajo sus diversas formas.

Argentina, tierra rica y tan necesitada, seguí abrigando en tus entrañas benditas, la vida y el deseo de paz de todos tus habitantes.

María, la Virgen de Luján, desde hace tiempo con nosotros está, a Ella le encomendamos nuestro peregrinar hacia la Patria Celestial y ponemos bajo su manto maternal la vida de todos los argentinos.

Argentina, tierra rica y tan necesitada, no te olvides nunca que en tu suelo bendito habita Dios, de Él recibimos el regalo de esperanza de ser una Patria mejor, de Él recibimos la fuerza para sonreír y solidarizarnos con el que menos tiene aún en medio del dolor y de la corrupción.

Que la Independencia de nuestra Nación sea identidad de la pasión por la verdad y el compromiso por el bien común, amando la existencia de la vida, bajo sus diversas formas, porque ella es expresión de libertad.

Con María, nuestra Madre de Luján, abrimos nuestro corazón para gritar con fe y esperanza: ¡Viva Argentina! ¡Viva nuestra Patria! ¡Viva nuestra Independencia!