Denla a conocer

lunes, 28 de junio de

 

¡Hola! Hoy quiere presentarte a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, es la patrona de los misioneros redentoristas.
Breve y rápidamente te cuento su historia, quedate hasta el final que cada vez se pone mejor.

Considero que es un icono misionero desde el principio: lo primero que se sabe de él es que estuvo en la isla de Creta en las manos de un comerciante, quien para evitar que la imagen fuera destruida, la llevó escondida en un barco. En medio del mar se desató una gran tormenta. El comerciante lleno de temor levantó el icono en alto y pidió socorro. En ese momento se produjo el milagro, la tormenta paró y el mar se calmó.

El comerciante llegó a Roma. Antes de morir le dijo a un amigo que se encargara de que el icono fuera venerado en una Iglesia Ilustre. De hecho, la Virgen misma manifestó su deseo de ser venerada entre la Iglesia de Sta. María la Mayor y la de S. Juan de Letrán. Luego de algunas ideas y vueltas, el icono finalmente fue puesto en el altar mayor de la Iglesia de San Mateo. Los escritores de la época narran numerosos milagros que se le atribuyen al icono.

Tres siglos después, Napoleón invadió Italia y con sus tropas destruyó más de treinta iglesias, incluyendo la de San Mateo… Pero … ¡No creeras que la historia termina ahí!

Los agustinos pudieron salvar el icono y se lo llevaron a una pequeña capilla, Santa María en Posterula, quedando allí sin culto popular por más de 60 años.

Tiempo después, los redentoristas llegaron a Roma y construyeron un templo. Uno de los sacerdotes comenzó a estudiar el sector de Roma donde vivían y allí encontró múltiples referencia a la Iglesia de san Mateo y al icono de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

Los redentoristas solicitaron al Papa Pio IX que les concediera la imagen, quien accedió y los dijo: “Denla a conocer por todo el mundo”.

Hoy, mucho tiempo después, y como laica redentorista, quería presentarte a la “Perpe”, como cariñosamente le decimos. Seguimos dando a conocer la advocación de nuestra madre que ha querido tomar el dulce nombre de Madre del Perpetuo Socorro, siendo sostén, refugio y guía para todos. 

Por último te quiero contar algunas de las particularidades del icono:

– Jesús está en los brazos de María, con una sandalia colgando. Como si hubiera ido corriendo a los brazos de su madre, asustado por lo que los arcángeles le mostraban: los signos de la pasión
– Desde el lugar que veas la imagen, los ojos de María te están mirando -¡Siempre atenta a sus hijos!-

Te invito a que puedas buscar más y seguir conociendo sobre está hermosa advocación de nuestra madre.

<<María, sé mi perpetuo socorro>>