Conseguir una buena convivencia con los vecinos puede resultar sencillo si se tienen en cuenta algunas normas básicas, fundamentadas principalmente en el respeto, la tolerancia y el cuidado de las cosas. Todo esto puede resultar muy sencillo si se tienen en cuenta unas normas básicas, fundamentadas principalmente en el respeto, la tolerancia y el cuidado de las cosas.
1. Conoce el vecindario. Ponerle cara a las personas que viven alrededor aporta seguridad y confianza a la hora de afrontar posibles problemas.
2. Saludá. Nunca está de más y siempre da pie al encuentro y al conocerse.
3. Da la bienvenida a los nuevos vecinos.
4. Cuida los espacios compartidos.
5. Evita ruidos molestos e innecesarios.
6. Enseña a los niños a convivir. Se debe explicar a los más pequeños dónde se puede o no jugar con la pelota, o por qué es importante no gritar ni poner la televisión muy alta a determinadas horas les convertirá en mejores ciudadanos desde la infancia.
7. Vigila a tus mascotas. Sacá a tu mascota a pasear siempre con correa para evitar posibles molestias a los vecinos, recoger siempre lo que ensucien.
8. Respetar las normas de tránsito, cruzando la calle, cuando el semáforo lo indica, manejando a la velocidad permitida, utilizando casco y cinturón de seguridad.
9. Ofrece tu ayuda cuando sea necesario.
10. Cuidar al conjunto es también cuidarte a vos y a los tuyos. Si ves algo fuera de lo común o peligroso, avisar a los vecinos para que estén alertas, a la policía, a los bomberos o a quien corresponda.