Dios hizo un universo para vos

martes, 18 de agosto de

“Y cuando te sientas solo, recordá que Dios hizo un universo para vos”

 

Muchas veces sentimos que lo que nos pasa pareciera que es todo malo, que solo hay ruedas en el camino, y que ese camino lo transitáramos solos… ¿te cuento algo? Aunque no parezca, NUNCA estas solo/a.

En esos momentos más difíciles, sentimos que dios justo justo se fue y se silenció, que nos deja solos y que no hay señal suya en nuestra vida. Pareciera que Dios agarró su celular, lo desconectó del wifi, de los datos y dijo “yo no recibo mas mensajes ni llamadas de nadie”.

Pero en esta cuarentena de cientos de días, descubrí en todas las cosas “malas” (por encasillarlas en un término) que me pasaron  que Dios no había apagado el celular ni mucho menos no recibía mis mensajes ni llamadas. Al contrario, quien había apagado el celular, desconectado wifi y los datos, cerrado con candado y metido en una cajita fuerte con un montón de cadenas alrededor había sido yo.

Yo le había apagado el celular, lo corrí a un lado, creyendo que Él no estaba, que no me ayudaba…  le impedí meterse en mi vida, y ¡claro! ¿Cómo lo iba a ver si lo estaba continuamente evitando?.

Cuando me rendí y ya los brazos no me daban más de remarla yo sola con mis fuerzas, cuando ni yo misma me aguantaba, ahí fue cuando empecé a llamarlo de corazón y a ver su mano, porque como dice la frase “deja todo en manos de Dios, y veras su mano en todo”.

Ahí lo descubrí, y descubrí que había un universo increíble que él me estaba regalando, brotando entre todo lo malo que estamos viviendo. Descubrí que ese universo que me regalaba era más grande de lo que imaginaba, sobre todo más grande de todo lo malo, y que todo lo que pasaba solo era “para bien de los que le aman” (Romanos 8;28).

Por eso te invito a vos, a que veas que este momento de tu vida, de tu historia ¡no lo estas trascurriendo solo! Descubrí como Dios se quiere hacer visible… quizás en un amigo que te escucha, en tu mamá que te prepara tu comida favorita, ¡en tu abuelo que te brinda una sonrisa… Animo! ¡A descubrir el universo enorme que Jesús creó para vos!