Jesús dijo a sus discípulos: “Dentro de poco, ya no me verán, y poco después, me volverán a ver”.
Entonces algunos de sus discípulos comentaban entre sí: “¿Qué significa esto que nos dice: ‘Dentro de poco ya no me verán, y poco después, me volverán a ver’?. ¿Y que significa: ‘Yo me voy al Padre’?”.
Decían: “¿Qué es este poco de tiempo? No entendemos lo que quiere decir”.
Jesús se dio cuenta de que deseaban interrogarlo y les dijo: “Ustedes se preguntan entre sí qué significan mis palabras: ‘Dentro de poco, ya no me verán, y poco después, me volverán a ver’.
Les aseguro que ustedes van a llorar y se van a lamentar; el mundo, en cambio, se alegrará. Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.”
En el Evangelio de hoy vemos que los discípulos tienen muchos interrogantes frente a los planteos de Jesús, tienen muchas preguntas. Llegan hasta decir “No entendemos lo que quiere decir”. Y así pasa muchas veces en la vida, tenemos tantos interrogantes, tantas preguntas, tantas cosas que no llegamos a comprender, que no entendemos. Creo que también lo que les paso a los discípulos, de no comprender algunas cuestiones de Jesús, algunas cuestiones de Dios, también nos pasa a nosotros. Muchas veces nos pasó o nos va a pasar de que no entendemos nada. ¿Te está pasando ahora?
Cuando estamos así con muchos interrogantes sin comprender, cuando tenemos tantas preguntas sin respuestas ¿Qué hacer? ¿Qué hacer en esos momentos? ¿En esos momentos donde parece que no vemos a Dios? ¿Qué hacer? Yo digo tener paciencia y confianza en Dios. Sobre todo, en los momentos inciertos abandonarnos a la confianza de Dios. Porque como lo escuche algunas veces en su momento cuando el Papa Francisco era Cardenal “Dios sabe lo que hace”. Una invitación muy fuerte a confiar en él. Llegará el momento donde lo comprenderemos todo. Ahora nos toca confiar, tener fe.
Confiar en las mismas palabras de Jesús. En su momento no lo veremos, pero después lo vamos a ver, vamos a ver que nunca nos abandonó. Que Él siempre está a nuestro lado, aunque no lo veamos. También el mismo Jesús nos dice “Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo”. Y es así, en su momento nos tocará llorar por las diferentes situaciones que podremos vivir. Pero también confiemos en que después nos tocará estar alegres y felices.
¿A qué te invita el Evangelio de Hoy? ¿Cómo es tu confianza en Dios? ¿Vez la necesidad de que en algunos momentos inciertos de la vida tenemos que abandonarnos en las manos de Dios y confiar en Él?
En este día le pidamos a Dios confianza y mucha fe en Él, sobre todo en los momentos más inciertos. “Dios sabe lo que hace”.
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