Jueves 23 de Abril del 2020 – Evangelio según San Juan 3,31-36

miércoles, 22 de abril de
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El que viene de lo alto está por encima de todos. El que es de la tierra pertenece a la tierra y habla de la tierra. El que vino del cielo da testimonio de lo que ha visto y oído, pero nadie recibe su testimonio. El que recibe su testimonio certifica que Dios es veraz.

El que Dios envió dice las palabras de Dios, porque Dios le da el Espíritu sin medida. El Padre ama al Hijo y ha puesto todo en sus manos. El que cree en el Hijo tiene Vida eterna. El que se niega a creer en el Hijo no verá la Vida, sino que la ira de Dios pesa sobre él.

 

Palabra de Dios

P. David Pintos sacerdote de la Diócesis de San Ramón de la Nueva Oran

 

El Evangelio de hoy nos pide que nosotros creamos en Jesús para tener vida, para alcanzar la vida eterna. Porque es así, cuando empieza a creer, cuando uno empieza a confiar en Jesús, uno de verdad que empieza tener vida, vida de verdad, vida verdadera, vida plena, vida en abundancia. Porque antes de Jesús todo era distinto, todo era oscuro y vacío. Antes de Jesús uno siente la sensación de que algo falta. Antes de Jesús nada tenía sentido, uno está desorientado. ¿Vos lo ves así? ¿Cómo era tu vida antes de Jesús? ¿Cómo te sentías? ¿Cómo te iba en la vida? Oh ahora mismo ¿Cómo te va en la vida sin Jesús?

Con Jesús la vida cambia, cambia todo y cambia todo para bien. Uno es diferente, la vida es diferente. Ahora con Jesús hay salida, hay rumbo, hay alegría, hay esperanzas. ¿oh no es así? Cuantas veces decimos en nuestras vidas que gracias a la confianza en Jesús nos hemos salvado de muchas cosas, cuantas veces nuestra confianza en Jesús nos llenó de alegría y felicidad.

“El que cree en el Hijo tiene Vida Eterna” nos dice el Evangelio de Hoy. Y nosotros estamos invitados a renovar nuestra fe en Jesús vivo y resucitado todos los días. Y más todavía en estos días de Pascua. Jesús ha vencido a la muerte, Jesús ah Resucitado, Jesús nos ha regalado la Vida Eterna.

Hoy te invito a que, en algún momento del día, en tu cuarto o en algún lugar de tu casa te hagas un tiempo y reces. Reces a Jesús vivo, que hables, que dialogues con él. Y pedir la gracia de sentir en tu corazón la vida en abundancia que sólo él la puede dar. Pedir la gracia de poder comprender la vida en abundancia que nos da Jesús. Como una ayuda para la meditación podes escuchar la canción que nos gusta mucho a los Jóvenes Argentinos “Vida en Abundancia”. Y así volver a renovar nuestra fe, nuestra confianza en Jesús resucitado que está entre nosotros.