Jesús dijo a sus discípulos: Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide pan, le da una piedra? ¿O si le pide un pez, le da una serpiente? Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan! Todo lo que deseen que los demás hagan por ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.
En este caminar en la Cuaresma el testimonio de Jesús nos invita a afianzar más y más nuestra confianza en Dios Padre. Nos enseña que Dios es un Padre bueno, que sabe lo que necesitamos y como dice en en el Evangelio de Hoy “cuanto más dará el Padre de ustedes que está en el cielo dará cosas buenas aquellos que se la pidan”.
Constantemente Jesús nos dice que tenemos un Padre que está en el cielo, que está con nosotros. Nos pide que siempre lo invoquemos, que lo tengamos presente, que le pidamos con confianza todo lo que necesitamos.
Jesús en todo momento se pone en sus manos y dialoga con él. Nosotros ¿Que hacemos? ¿Invocamos a Dios Padre en todo momento? ¿Nos ponemos en sus manos? ¿Le pedimos con confianza de hijos queridos cuando necesitamos alguna bendición para nuestras vidas?
Si hay algo en lo que podemos trabajar en esta cuaresma es la de crecer en la confianza de hijos hacia Dios Padre, cómo Jesús. Leer y meditar el Evangelio en esa clave de confianza.
Los Santos nos enseñan sobre la confianza en Dios Padre, cómo por ejemplo Charles de Foucauld con un oración muy linda que te invito a que la realices siempre:
“Padre, me pongo en tus manos Haz de mi lo que quieras Sea lo que sea, te doy gracias Estoy dispuesto a todo, Lo acepto todo Con tal que tu voluntad Se cumpla en mi y en todas tus criaturas No deseo más, Padre Te confió mi alma Te la doy con todo mi amor Porque te amo Y necesito darme a Ti Ponerme en tus manos, Sin limitación, sin medida. Con una confianza infinita Por que tu eres mi Padre Padre, me pongo en tus manos Haz de mi lo que quieras Sea lo que sea, te doy gracias.”
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