Quiero aprender a acoger lo que es aunque me pese.
Quiero estar con las manos abiertas para recibir lo que me des,
sea esto plenitud o vacío,
gozo o tristeza,
respuesta o interrogante,
esperanza o pesimismo,
valentía o miedo,
palabra o silencio hueco.
Lo que tú me des,
eso quiero recibir.
Enséñame a vivir
con las manos abiertas
ante tu Misterio.