El Señor dijó:«Supongamos que uno de ustedes tiene un servidor para arar o cuidar el ganado. Cuando este regresa del campo, ¿acaso le dirá: ‘Ven pronto y siéntate a la mesa’?¿No le dirá más bien: ‘Prepárame la cena y recógete la túnica para servirme hasta que yo haya comido y bebido, y tú comerás y beberás después’?¿Deberá mostrarse agradecido con el servidor porque hizo lo que se le mandó?Así también ustedes, cuando hayan hecho todo lo que se les mande, digan: ‘Somos simples servidores, no hemos hecho más que cumplir con nuestro deber’.»
En el Evangelio de Lucas digamos así que hoy se nos echa un baño de humildad, aunque no negamos el valor humano y divino de ser agradecidos el Evangelio nos dice hoy que no debemos hacer nada para que nos reconozcan. Debemos servir a los demás porque el servir ya es la paga, porque el servir al otro es el premio, porque de esa forma estamos siendo más parecidos a Jesús, porque estamos participando más de su misterio porque el esta en la mesa como el que sirve, porque el ha venido a lavarnos los pies porque el no ha venido a ser servido sino a servir. Servir porque de esa manera nos unimos más a Jesús.
Que tengas un hermoso día.