Martes 27 de Octubre del 2020 – Evangelio según San Lucas 13,18-21

martes, 27 de octubre de
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Jesús dijo entonces: “¿A qué se parece el Reino de Dios? ¿Con qué podré compararlo?
Se parece a un grano de mostaza que un hombre sembró en su huerta; creció, se convirtió en un arbusto y los pájaros del cielo se cobijaron en sus ramas”.
Dijo también: “¿Con qué podré comparar el Reino de Dios?
Se parece a un poco de levadura que una mujer mezcló con gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa”.

 

 

Palabra de Dios

 

Monseñor Ricardo Seirutti obispo auxiliar de Córdoba y Delegado Episcopal para la Pastoral de Juventud Argentina

 

¡Que tal chicos y chicas, que siguen esta transmisión! Este Martes el evangelio en palabras de Jesús, nos dice que “el Reino, se parece a una semilla, a un grano de mostaza” y también lo compara “con un poco de levadura”. En los dos casos el crecimiento es inmenso. Un árbol, dice en donde los pájaros después se cobijan en sus ramas y la levadura que una mujer hizo una mezcla con harina y ¡crece, crece, crece! Por si misma, sola, simplemente por la providencia de Dios ¿no? Y el aire, el sol, el agua, todo hace crecer. Y a eso se parece ¡el Reino de Dios!

Les propongo, este Martes, ¡miren que lindo! pensar si me doy cuenta que en mi corazón, en mi vida, va creciendo el Reino de Dios. ¡Rezar! ¿Como va creciendo el Reino de Dios en mi corazón? Habitualmente, no me doy cuenta. ¿no?. Por eso es bueno que nos detengamos cada tanto y veamos cuánto hemos crecido. Qué lindo descubrir que el Reino de Dios, sigue creciendo en mi corazón. A pesar de un montón de cosas, que también las tiene el árbol, que también las tiene la masa. Hay un montón de cosas que a veces retrasan el crecimiento, o a veces detienen el crecimiento. ¡Bueno! Estoy seguro que con nosotros, los discípulos de Jesús nos pasa así. No nos damos tanta cuenta, pero cada tanto tenemos que mirar, ¿no?, mirarnos para adentro y decirle ¡Jesús, ilumíname para que vea “cuánto” va creciendo el reino de Dios, en mi corazón! Anímense a hacer ese ejercicio.

Bueno, y comentenselo a los demás después cuando descubran ¡cuanto va creciendo el Reino de Dios!, cuentenselo a alguien:
“Che, vos sabes que, el Reino de Dios, como esa semilla pequeña de mostaza que fue puesta en mi bautismo, que fue puesta en un encuentro con Jesús que tuve, HA CRECIDO y ESTA CRECIENDO, y va a seguir creciendo en mi!”.

¡Descubrirlo y contarlo! ¡Un abrazo y que Dios los bendiga mucho!