Mirar como miras Tú mi vida, mis intentos, mi cansancio, mi entrega cotidiana, mis miedos, mis búsquedas, mi corazón.
Mirar y amar lo que soy, lo que puedo, lo que intento. Absolverme, declararme inocente frente a mis juicios carentes de misericordia.
Desenmascarar sin fuerza alguna sino con profunda suavidad al súper yo que quiere poderlo todo, hacerlo todo, ser lo que no es.
Dejarme enamorar por lo que es, el canto de los pájaros y el aire atravesándome, por lo que otros son, revelación, por lo que soy, posibilidad.
Sentarme serena y contemplar mis pasos y verte a Ti moviéndome, haciéndome, amándome, y allí descansar.
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