17/04/2019 – Con motivo de la Semana Santa, la comunidad parroquial La Rábida de la Capital Federal salió del templo para salir al encuentro de las personas que pasaban por la zona del Congreso de la Nación, en el corazón de la Capital Federal.
Juan Corral de 24 años, estudia ingeniería civil, y participa en el grupo de jóvenes de la Parroquia y en el coro, y los sábados tiene su servicio acompañando a un grupo de chicos de 5 a 12 años. Él fue uno de los tantos que participaron de la misión de Ramos. “Misionando comprobé que la casa de Jesús es la casa de todos. El Papa Francisco nos dijo a los jóvenes “Hagan lío”, haciendo referencia a salir a la calle, hacerse presente en la realidad de cada barrio, dándole la posibilidad de agradecer o pedir algo, acompañando a la gente, mostrándoles que Jesús está con ellos, que conocerlo les cambia la vida” contó.
Además destacó que haya sido en ese lugar: “El sábado pasado tuve la gracia de poder misionar pre Domingo de Ramos frente al Congreso de la Nación, un lugar que en tantas oportunidades resulta conflictivo. En esta ocasión, todo eso quedó atrás: fue un día espléndido, lejos quedaron los conflictos y se llenó de paz”.
“Con un pequeño gazebo, pero engrandecido por la presencia de Jesús, pudimos ser instrumento de Él a través del canto para ayudar a rezar a tanta gente que se acercó hasta allí. Desde temprano y con la exposición del Santísimo fui testigo de un desfile de gente, que necesitada de tan solo unas palabras o una bendición, para aliviar su carga, seguía su camino más feliz y de eso no tengo ninguna duda, porque arrancar la mañana adorándolo, me cambio el día”.
Las anécdotas de lo compartido con la gente fueron muchas, pero Juan destacó una: Recuerdo estar rezando y en un momento, me doy vuelta y había una mujer con un bebe en un carrito, agachada al lado del bebe y agarrándole la mano y cantando las canciones”.