21/08/2019 – Agus Dalmaso es porteño, trabaja en un call center, estudia Radio y Televisión y participa de un grupo de jóvenes de la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera. El frío no es excusa para él ni para sus compañeros de aventuras. El fin de semana pasado viajaron a Mercedes para anunciar el evangelio. Para Agus no es una actividad más, para él la misión es un estilo de vida.
Hola me llamo Agustín y soy de Capital Federal. Hace unos días compartí un fin de semana con el grupo misionero Madre Teresa de Calcuta, de la parroquia Nuestra Señora de Balvanera y misionamos en la localidad de Mercedes, Provincia de Buenos Aires. Tal como dice la canción “misión un estilo de vida”, y así lo vivo yo. Dejar de lado actividades que uno hace para entregarse a la voluntad de Dios e ir a anunciar su Palabra, cuan grato es poder dar un poco de uno para verlo reflejado en los demás. No hay nada más gratificante que ver a la gente contenta, sabiendo que recibieron la buena nueva del Señor. Lo lindo de saberse herramienta de Dios aquí en la tierra para transmitirlo. Un gran amigo mío me decía que siempre pasa que uno va a evangelizar y resulta evangelizado, de eso se trata, así que no lo dudes, acercate al grupo misionero más cercano que tengas y anímate a ser palabra de Dios y recordá siempre que donde haya dos o más personas reunidas en su nombre, allí estará Él siempre presente. Recemos juntos por las vocaciones misioneras para que sigan surgiendo y seamos muchos más los mensajeros de Dios. Muchas gracias por tu tiempo para leerme.
Hola me llamo Agustín y soy de Capital Federal. Hace unos días compartí un fin de semana con el grupo misionero Madre Teresa de Calcuta, de la parroquia Nuestra Señora de Balvanera y misionamos en la localidad de Mercedes, Provincia de Buenos Aires.
Tal como dice la canción “misión un estilo de vida”, y así lo vivo yo. Dejar de lado actividades que uno hace para entregarse a la voluntad de Dios e ir a anunciar su Palabra, cuan grato es poder dar un poco de uno para verlo reflejado en los demás. No hay nada más gratificante que ver a la gente contenta, sabiendo que recibieron la buena nueva del Señor. Lo lindo de saberse herramienta de Dios aquí en la tierra para transmitirlo.
Un gran amigo mío me decía que siempre pasa que uno va a evangelizar y resulta evangelizado, de eso se trata, así que no lo dudes, acercate al grupo misionero más cercano que tengas y anímate a ser palabra de Dios y recordá siempre que donde haya dos o más personas reunidas en su nombre, allí estará Él siempre presente.
Recemos juntos por las vocaciones misioneras para que sigan surgiendo y seamos muchos más los mensajeros de Dios. Muchas gracias por tu tiempo para leerme.
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