Permanecer en el Amor: Judas

jueves, 14 de abril de

Sobrepasar la culpa, ir más allá de la vergüenza, alcanzar la otra orilla, dejarnos mover por el dolor que nos invita a corregirnos y a aprender.

Judas en primera persona

Traicionar al Amor, dolernos, espantarnos de nuestra miseria, querer huir, imponernos el castigo a falta de encontrar un Padre castigador. Qué difícil es aceptar el perdón, inmerecido, absoluto, liberador.

Qué complejo acoger la plena aceptación, dejarnos inundar y empapar por otra lógica que no es la propia, dejarnos sumergir en el Amor y dejar que sane aquello que aun duele.

Qué duro reconocer que yo también a veces me vendo y huyo de tu Misterio de descentramiento, entrega y plenitud. ¡Y  qué liberador sentir que Vos mirás con ternura mi debilidad! Qué esperanzador es saber que aun conociendo nuestra fragilidad confíes en tu semilla de Vida y en nuestra capacidad de germinar.

Cuánto te agradezco Jesús, amado y amante, que desde la cruz me llames a la Vida, una y otra vez. Mis muertes terminan con tu Resurrección. En mi corazón vencerá el Amor y eso te lo debo a Vos.

 

Guía mis pasos, encarna en mis ojos tu mirada de amor y misericordia para mirarme y mirar desde Vos.