“¿Por quién te tienes?”

jueves, 10 de abril de

«”…antes de que Abrahám existiera, yo soy”. Entonces tomaron piedras para tirárselas» (Jn 8,59).

Moisés creyó: «”¿Qué les responderé si me preguntan cuál es su nombre?”. Dios le dijo a Moisés “Yo soy el que soy”» (Éx 3,14).

En el templo, ahora, los judíos juzgan y quieren lapidar la blasfemia. ¡Quieren esconder el Ser eterno bajo piedras de justicia humana!

Juzgan y no ven más que a un hombre, la divinidad se les oculta. Lo eterno es un escándalo que desordena sus muy estructurados preceptos. ¿Dónde quedó la mirada desnuda de Moisés?

«Antes de que Abrahán existiera, yo soy». Es el tiempo de Dios. No «los tiempos de Dios» para nosotros, para nuestros procesos. Pasado, presente y futuro están juntos. En la eternidad, Es.

Piedras contra la eternidad

Levantaron las piedras
cuando dijo:
«Yo Soy».

Es el tiempo divino…
El tiempo sin tiempo
ese
que no comprenderán…

«Yo Soy.
También
humano,
en esta carne,
que miran.
Me miran
pero no ven
que Soy…».