Sigue siempre creciendo, siempre caminando, siempre avanzando

miércoles, 20 de marzo de
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La vida sigue un ritmo ascensivo constante. No se permite quedarse sujeto, pues esto equivale a retroceder. Subir, subir siempre: he aquí la ley de la vida interior. El hombre es un caminante que debe seguir adelante: Si me preguntas: ¿qué es caminar? Te diré en breves palabras: Seguir adelante, progresar.

Progresen hermanos míos; reflexionen siempre sin engaño. Avergüenzate de lo que eres para llegar a ser lo que no eres. Si estás satisfecho de ti mismo, ya te has detenido. Si dices: Ya basta, estás perdido. Sigue siempre creciendo, siempre caminando, siempre avanzando; no te pares, no vuelvas atrás, no te pierdas. Se detiene el que no avanza; retrocede el que vuelve a las cosas que ya dejó.

San Agustín