Levanta la lámpara hermano que ya es de noche y está oscuro. Recobra fuerza y sé vigilante que no te asuste ningún mal.
Está a tu lado Aquel que prometió estar con vos para toda la vida. Porque aún cuando la noche se avecina Te aseguro que no estás solo.
“Yo estoy contigo hasta el fin del mundo” el Señor nos dice y nos anima. Confía en él y estarás bien, estarás mejor.
Enciende tu lámpara para que veas el camino y la noche te sea más clara como el día. Así no te caigas en la tentación, más sigas en el camino.