¡Ven Manto de Dios! – Oración Domingo de Ramos

viernes, 12 de abril de
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De repente, mientras entrabas a Jerusalén, mantos entre tu humanidad y la tierra…Mantos de la gente, muy numerosa, tendidos a tu paso.

¿Qué mantos de mentiras hemos tendido ante Tu Presencia figurando ser mantos de alabanza sin despojos…? Despojos de las visiones vanas para asumir la tierra que has venido a pisar: nuestra tierra, nuestro humus, nuestra humanidad, tu morada.

No hay manto existente que pueda cubrir tus pisadas de entrega y consuelo.
No hay manto que pueda falsear tu poder débil de Rey de Amor y no de fuerza.

Del manto de la mentira que oculta tu escandalosa debilidad humana te has despojado. Sí, en el lavatorio de los pies, quitándote tus vestidos luego de levantarte de la mesa, para volverlos a tomar después de haberte derramado como una libación insospechada. En la mesa nuevamente, en la Mesa de la Entrega de Amor hecho Pan.

Los vestidos, que te los han quitado en el juicio, dejándote escandalosamente como un Dios desnudo y desamparado, coronado de espinas.

El manto, la túnica. Ésa, sin costuras, de una sola pieza, que han rasgado y repartido en cuatro: todos los horizontes, todas nuestras dudas, todos nuestros dolores, nuestras vidas…

Los sudarios. Las vendas que cubrían tu cuerpo muerto han quedado ahí, al costado. Al costado de la Vida, cuando Vos mismo tomaste el gesto de quienes te esperaban en Jerusalén tirando mantos, palmas y flameaban olivos a tu Paso. Sí, tomaste este gesto y lo plenificaste con tu propia entrega. Ahora Vos mismo te convertís en un Manto tendido para que caminemos sobre la senda de tu Vida y entremos a la Jerusalén Celestial, hecha toda de Trinidad, comunión de hombres, mujeres, niños, y tantos que han partido y nos esperan para la Fiesta Total.

Ya no hay mantos que puedan estar entre Tu vida y nuestro humus sediento. Pisás nuestros mantos para convertirte en Manto de Dios para nuestros pies…

¡Ven Manto de Dios! A pisar sobre el manto de mi corazón
¡Ven Manto de Dios! A cubrir la desnudez que me ha dejado la vida
¡Ven Manto de Dios! Tus pisadas sobre mi memoria dejan tus huellas de Eterno
¡Ven Manto de Dios! A cubrir la vulnerabilidad sostenida por Tu Gracia
¡Ven Manto de Dios! Esperanza de Reencuentro regalada con tu Pascua
¡Ven Manto de Dios! ¡Ven!

 

Hna. Silvia de la Misericordia