Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «Escuchen otra parábola: Un hombre poseía una tierra y allí plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero.Cuando llegó el tiempo de la vendimia, envió a sus servidores para percibir los frutos. Pero los viñadores se apoderaron de ellos, y a uno lo golpearon, a otro lo mataron y al tercero lo apedrearon. El propietario volvió a enviar a otros servidores, en mayor número que los primeros, pero los trataron de la misma manera. Finalmente, les envió a su propio hijo, pensando: “Respetarán a mi hijo”.Pero, al verlo, los viñadores se dijeron: “Este es el heredero: vamos a matarlo para quedarnos con su herencia”. Y apoderándose de él, lo arrojaron fuera de la viña y lo mataron.Cuando vuelva el dueño, ¿qué les parece que hará con aquellos viñadores?». Le respondieron: «Acabará con esos miserables y arrendará la viña a otros, que le entregarán el fruto a su debido tiempo.»Jesús agregó: «¿No han leído nunca en las Escrituras: La piedra que los constructores rechazaron ha llegado a ser la piedra angular: esta es la obra del Señor, admirable a nuestros ojos? Por eso les digo que el Reino de Dios les será quitado a ustedes, para ser entregado a un pueblo que le hará producir sus frutos.»Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír estas parábolas, comprendieron que se refería a ellos.Entonces buscaron el modo de detenerlo, pero temían a la multitud, que lo consideraba un profeta.
Buen dia, buen dia. Nos volvemos a encontrar junto a Jesús y su Palabra. Soy el Padre Cristian Salomón, estoy en la Parroquia Nuestra Señora de Fátima, en la Ciudad de Las Parejas, en la provincia de Santa Fe y Diócesis de Rosario.
Hoy segundo viernes de cuaresma, el evangelio nos hace encontrar con la parabola de la Viña y los viñadores homicidas. Jesús dirigiendose a los lideres religiosos de su pueblo, no solo les reclama que no están dando frutos sino que también los hace cargo de la testarudez por desechar y les dice: “Por eso les digo que el Reino de Dios les será quitado a ustedes, para ser entregado a un pueblo que le hará producir sus frutos”
Dos o tres puntitos para pensar y rezar en el dia.
1. Somos administradores y trabajadores de una viña que es re fecunda, que da fruto a montones!! Sólo hay que trabajar modesta y humildemente para cuidar la calidad de los frutos. El cuidado metodico y humilde es nuestra sencilla y cotidiana tarea, porque el trabajo importante ya lo hizo el Dueño, siempre lo hace Dios. Gracias Señor por hacernos parte de esta Viña
2. A veces nos subimos al Pony y nos creemos dueños, pensamos que somos nosotros los que tenemos la posta para dar fruto, y empezamos a presumir y tirar piedras sobre los hermanos que también, como nosotros, son servidores del Dueño de la Viña.
La presunción nos adormece, nos hace creer que ya tenemos domesticado a Dios y la vida Cristiana, que lo que ya hacemos y somos está bien, no hace falta más.
3. Diosito nos regale la gracia de no quedarnos atrincherados en nuestra presunción y comodidad, sino que saliendo cada día de nosotros y mirando la enorme viña del Señor, podamos trabajar cuidando y haciendo crecer lo que El mismo comenzo.
Dar gracias por lo recibido y que con humildad y creatividad, podamos cuidar y hacer crecer su Reino.
Dios te bendiga.