Viernes 14 de Junio del 2019 – Evangelio según San Mateo 5,27-32

jueves, 13 de junio de
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Jesús dijo a sus discípulos:

Ustedes han oído que se dijo: No cometerás adulterio. Pero yo les digo: El que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón.

Si tu ojo derecho es para ti una ocasión de pecado, arráncalo y arrójalo lejos de ti: es preferible que se pierda uno solo de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado a la Gehena.

Y si tu mano derecha es para ti una ocasión de pecado, córtala y arrójala lejos de ti: es preferible que se pierda uno solo de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado a la Gehena.

También se dijo: El que se divorcia de su mujer, debe darle una declaración de divorcio.

Pero yo les digo: El que se divorcia de su mujer, excepto en caso de unión ilegal, la expone a cometer adulterio; y el que se casa con una mujer abandonada por su marido, comete adulterio.

 

Palabra de Dios

 


P. Javier Soteras director de Radio María Argentina

 

Es el texto que elige la liturgia de la Iglesia Católica para regalarnos la posibilidad de meditar en torno a la Ley, tal cual se enseñó en el antiguo testamento, tal cual Jesús, valiéndose de la riqueza de la primera tradición, a la que Él pertenecía, la transforma, la resignifica de su lugar de presencia de amor que lo hace nuevo todo.

Este es el sentido que tienen: “a usted si les dijo, pero Yo les digo” – sobre todo porque hay que entender que lo que se dijo no se anula sino que se resignifica. La enseñanzas de Jesús apunta a esto, justamente, a resignifica el mensaje.

En este sentido somos invitados a la luz de la palabra evangélica que compartimos hoy, a pasar en una ley de “mínima” a una ley de “máxima”, la ley de amor, de magis.

Muchas veces creemos que el cristianismo es una lista larga de normas y mandamientos que debemos cumplir. Algunos sacramentos parecen más un trámite civil qué otra cosa, es más, parece que Jesús en este pasaje nos complica porque nos saca del “deber ser” pero… eso no es el cristianismo.

No se comienza a ser cristiano decía Benedicto XVI en Deus caritas est por una decisión ética, o una gran idea, o podemos añadir a las palabras del Papa, por un cumplimiento de normas. Sino por el encuentro, con un acontecimiento, con una persona que da un nuevo horizonte a la vida y con ello, una orientación decisiva. Es una presencia silenciosa, seductora que nos atrae progresivamente y nos conquista el corazón captando todo el sentido que supone su presencia en nuestra vida.

Es solo a través de Jesús, del prisma de su amor que se puede, no sólo entender, sino sobre todo vivir su propuesta. Un mundo nuevo, que supone hombres y mujeres nuevas, transformados por el Espíritu Santo

Te invito a vivir el evangelio del amor, el evangelio de Jesucristo. Allí se entiende la enseñanza de Jesús en el evangelio de Mateo en el capítulo 5. ¡Que tengas un hermoso día!