Se acercaron a él algunos fariseos y, para ponerlo a prueba, le dijeron: “¿Es lícito al hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?”.El respondió: “¿No han leído ustedes que el Creador, desde el principio, los hizo varón y mujer;y que dijo: Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su mujer, y los dos no serán sino una sola carne?De manera que ya no son dos, sino una sola carne. Que el hombre no separe lo que Dios ha unido”.Le replicaron: “Entonces, ¿por qué Moisés prescribió entregar una declaración de divorcio cuando uno se separa?”.El les dijo: “Moisés les permitió divorciarse de su mujer, debido a la dureza del corazón de ustedes, pero al principio no era así.Por lo tanto, yo les digo: El que se divorcia de su mujer, a no ser en caso de unión ilegal, y se casa con otra, comete adulterio”.Los discípulos le dijeron: “Si esta es la situación del hombre con respecto a su mujer, no conviene casarse”.Y él les respondió: “No todos entienden este lenguaje, sino sólo aquellos a quienes se les ha concedido.En efecto, algunos no se casan, porque nacieron impotentes del seno de su madre; otros, porque fueron castrados por los hombres; y hay otros que decidieron no casarse a causa del Reino de los Cielos. ¡El que pueda entender, que entienda!”.
Seguimos caminando con Jesús hacia Jerusalén, hemos escuchado su Palabra que nos invita a ser fraternos, corrigiendo, perdonando, reconociéndonos hermanos, hoy nos sigue enseñado a partir de preguntas que le van haciendo y nos Habla del Matrimonio.
Si bien a Jesús lo ponen a prueba con una cuestión candente, controvertida y polarizada del momento, el Señor responde poniéndose por encima de la cuestión polémica, para decir y enseñar lo que Dios quiere…que el hombre no separe lo que Dios ha unido, y volviendo a la fuente, el que se divorcia comete adulterio.
En este tiempo en el cual vivimos, de tantas rupturas, fracasos y separaciones, de tan pocas uniones matrimoniales sacramentales, hablar de matrimonio para siempre y de adulterio, para muchos incluso cristianos, parece anticuado porque hemos reducido el análisis y el opinión de la cuestión a lo inmediato, olvidando lo que Dios quiere y su sueño para nosotros, pero también por creemos que no hace falta tanta formalidad ni papeles, corrompiendo así lo importante del compromiso, de la alianza, de la expresión pública de compromiso.
Hay situaciones o relaciones que no pueden ser y se comprenden pero hoy estamos mirando lo valioso de lo que Dios quiso y soñó: El matrimonio para que el hombre y la mujer pudiesen estar juntos y este compromiso, ser felices. Que el matrimonio entre el hombre y la mujer sea un llamado de Dios a formar familia, a ser felices y que si bien hay situaciones que son especiales, y que no tenemos que juzgar, si estamos llamados a mirar el amor esponsal no como algo pasajero, sino como una realidad que se construye desde la fidelidad y el para siempre, desde Dios.
Que no nos gane el chiquitaje de lo descartable, lo uso hasta que me sirve, por el contrario queremos amar como Dios nos ama, para siempre. Amar para siempre es, darse, entregarse, en la prueba, en la dificultad, luchando para construir lo que dios quiere, que seamos felices.
Que siempre podamos formar y alentar relaciones de amor, sanas, fieles, entregadas y felices. Es posible y vale la pena!!!Dios te bendiga, que tengas lindo día