Continúa el conflicto en Famatina por el emplazamiento de una minera salteña

19/10/2015 – La semana pasada, un nutrido grupo de asambleístas y vecinos de Famatina protestaron en contra del emplazamiento de una minera salteña en esta ciudad riojana. El movimiento asambleario y vecinal contrario a la megaminería en Famatina acudió a la justicia riojana mientras sostiene el corte al tránsito hacia Angulos, para reclamar que se retire una empresa minera sobre el cauce del río Blanco.

El intendente de Famatina, Ismael Bordagaray, hizo una presentación ante la justicia de Chilecito a raíz de que la empresa Midais no cuenta con habilitación comercial para funcionar y la municipalidad tiene una orden de clausura que no puede efectivizar por la protección policial del emprendimiento.

En tanto, hacia el final de la semana, se dieron enfrentamiento en donde se registraron agresiones por parte de la policía y resultaron heridos algunos vecinos y asambleístas. Frente a estos hechos, la iglesia Riojana se pronunció al respecto a través de un comunicado firmado por el Arzobispo de La Rioja, Monseñor Marcelo Colombo. En diálogo con Radio María, el obispo dijo que “se trataría de una extracción con fines de estudio, según dice la presentación del proyecto  oficial, pero lo cierto es que hace unos días tuvimos dificultades grandes”. 

Hay que trabajar en función de la población. Como saldo permanente de este conflicto, desde hace 5 años, ha quedado una gran división en el pueblo que es una hipoteca para el futuro además de ser una situación muy dolorosa. 

Además, el obispo Riojano, comentó que “provincias tan pobres del interior, como la nuestra, buscan a través en estos emprendimientos quizás la posibilidad de salvarse, pero sabemos que salvarse a cualquier costo es traumático porque estás utilizando el agua que tiene un valor enorme no solo para esta generación sino para las futuras. El agua que la provincia posee es mucha y da como una fuente natural en el Famatina, sabemos que hay que cuidarla y que vale más que el oro”.

“En este tipo de emprendimientos se necesita la licencia social, es decir el consenso de la población que debe estar informada. Algunas dicen que eso no aparece en el código civil, y no, no está, pero sí en las leyes internacionales que la Argentina suscribe y que tienen rasgo institucional. La conciencia que tenga una población sobre una problemática la lleva a expresarse” comentó.

Carta de Monseñor Colombo

Ante los recientes sucesos acontecidos en la localidad de Angulos, del Departamento Famatina, deseo manifestar mi profundo dolor y preocupación.

La violencia en cualquiera de sus formas daña la comunidad política que constituimos y nos debilita como sociedad, engendrando mayores males que es preciso detener a partir del diálogo y el ejercicio de la responsabilidad política de todos los sectores.

En el contexto de lo sucedido, pido a las autoridades que se implementen aquellas medidas que salvaguarden efectivamente la seguridad de la población afectada por el conflicto.

Recientemente en ocasión del Día de Oración por el cuidado de la Creación manifesté: “Toda decisión que comprometa la vida común a partir de una obra pública, un emprendimiento empresario o alguna forma de inversión productiva, requiere la reflexión de la sociedad que debe dar su parecer a través de consultas oportunamente efectuadas.”

La cuestión de la preservación del agua no debiera considerarse un “problema de Famatina” y sus pobladores. Es una causa de todos los riojanos. Lo sucedido en Jáchal, en la hermana provincia de San Juan tendría que ayudarnos en la toma de decisiones razonables sobre la utilización de los cursos de agua. A la escasez crónica de agua que nos afecta, podríamos agravarla dramáticamente a partir de su eventual envenenamiento por contaminación. No hay desarrollo posible en el futuro para esta provincia sin cuidar el agua que es vital para nuestra vida. ¡Nosotros somos esa agua!

Concluyo con las palabras del papa Francisco en el 2do encuentro de movimientos populares que tuvo lugar en Bolivia en el pasado mes de julio: “No se puede permitir que ciertos intereses –que son globales pero no universales– se impongan, sometan a los Estados y organismos internacionales, y continúen destruyendo la creación. Los pueblos y sus movimientos están llamados a clamar, a movilizarse, a exigir –pacífica pero tenazmente– la adopción urgente de medidas apropiadas”.

El Niño Jesús de Gualco, nuestro Niño Alcalde y buen Pastor nos ayude en la consecución trabajosa pero siempre apasionante del bien común.+