León XIV pidió que haya equilibrio entre Misericordia y Justicia en los procesos de nulidad matrimonial

viernes, 21 de noviembre de 2025

Fuente: @VaticanMedia

21/11/2025 – El Papa León XIV exhortó a los participantes del Curso Internacional promovido por el Tribunal de la Rota Romana a considerar las interrelacionadas dimensiones jurídica, eclesiológica y pastoral en los procesos de nulidad matrimonial. Durante la audiencia, celebrada este viernes en el Palacio Apostólico, el Santo Padre hizo hincapié en que estos procedimientos no deben verse como un «campo meramente técnico» ni como medios que busquen «únicamente asegurar la libertad de las personas». La reunión se enmarcó en la conmemoración de los diez años de la reforma del proceso matrimonial canónico, iniciativa encargada por el Papa Francisco.

El Santo Padre instó a reflexionar sobre dos fundamentos eclesiológicos de los procesos judiciales: el «poder sagrado» ejercido «al servicio de la verdad» y el «misterio de la alianza conyugal». En este contexto, el Papa León XIV afirmó que la actividad judicial conlleva un «aspecto fundamental del servicio pastoral», la «diaconía de la verdad». Citando parte de su discurso, recordó que “Todo creyente, toda familia, toda comunidad necesita la verdad sobre su situación eclesial para poder transitar plenamente su camino de fe y caridad”.

El Obispo de Roma se detuvo en la necesidad de conjugar la misericordia y la justicia, inspirándose en Jesús, el Juez «bondadoso y misericordioso». Sin embargo, advirtió que el «juicio humano sobre la nulidad matrimonial no debe, sin embargo, ser manipulado por una falsa misericordia». El Papa enfatizó que «la verdadera misericordia debe ejercerse en el debido ejercicio del poder judicial». Para ilustrar este punto, citó a San Agustín en De civitate Dei: «¿Qué es la misericordia sino cierta compasión de nuestro corazón por la miseria ajena, que nos impulsa, si podemos, a aliviarla? Y este impulso es útil a la razón cuando la misericordia se ofrece de tal manera que se preserve la justicia».

Según el Pontífice, la reforma procesal, enfocada en la accesibilidad y rapidez de los trámites, «nunca a expensas de la verdad», es precisamente una manifestación de justicia y misericordia. León XIV reiteró el presupuesto teológico del matrimonio, fundado por el Creador, y recordó la importancia de la unión conyugal como el «canon del verdadero amor entre un hombre y una mujer». Subrayó, en referencia al Jubileo de las Familias, que “el matrimonio no es un ideal, sino el canon del verdadero amor entre un hombre y una mujer: amor total, fiel y fecundo”.

El Papa también hizo referencia a sus predecesores, señalando que el proceso canónico es «esencialmente un instrumento para esclarecer la verdad sobre el vínculo matrimonial», tal como lo definió Benedicto XVI. En este sentido, instó a valorar la institución del proceso judicial, considerándolo no una «engorrosa acumulación de requisitos procesales, sino como un instrumento de justicia». Recalcó que “La institución del proceso judicial debe valorarse, considerándola no como una engorrosa acumulación de requisitos procesales, sino como un instrumento de justicia”.

Finalmente, León XIV instó a tener siempre presente la búsqueda de la verdad y la salus animarum (la salvación de las almas) como la ley suprema y fin último de los procedimientos. El Papa reconoció la relevancia de la actividad judicial de la Iglesia en la pastoral familiar y recomendó no subestimar la labor de los tribunales eclesiásticos. La sinergia entre la atención pastoral y el ámbito judicial propicia la «implementación de la investigación prejudicial» para determinar si existen motivos para un proceso de nulidad, concluyó.

Fuente: Vatican News.