Audiencia de León XIV con los líderes sindicales de Chicago

jueves, 9 de octubre de 2025

Fuente: @VaticanMedia

09/10/2025 – La Doctrina Social de la Iglesia ha reconocido, desde Rerum Novarum (1891), la legitimidad y necesidad de los sindicatos como defensores de la dignidad del trabajo y de los trabajadores. Lejos de ser solo estructuras de reclamo económico, los sindicatos son vistos como agentes del bien común, promotores de justicia social y canales para la participación activa de los ciudadanos en la vida pública. En este espíritu, el Papa Francisco afirmó en 2018 ante los líderes gremiales italianos que “los sindicatos son un lugar profético”, es decir, espacios donde se denuncia lo que hiere la dignidad humana y se anuncia un modelo de sociedad más justo y fraterno, la defensa de los derechos laborales y la importancia teológica del trabajo en el plan de Dios.

Este legado fue retomado recientemente por el Papa León XIV durante la audiencia concedida a los líderes sindicales de Chicago, ciudad con fuerte tradición obrera, quienes se encuentran en Roma con motivo del Año Jubilar. Acompañados por el cardenal Blase Cupich, los representantes de miles de trabajadores fueron alentados por el Pontífice a continuar su compromiso por la inclusión social, el respeto a los más vulnerables y la construcción de una sociedad donde todos puedan prosperar. En sus palabras, el Papa destacó que “aunque reconozco que se necesitan políticas adecuadas para garantizar la seguridad de las comunidades, los animo a que sigan trabajando para que la sociedad respete la dignidad humana de los más vulnerables”.

León XIV subrayó el valor del trabajo conjunto entre la Iglesia y el movimiento sindical, especialmente en acciones concretas como el apoyo a seminaristas, los comedores sociales, los refugios para migrantes y la formación en energías renovables. Este esfuerzo conjunto –dijo el Papa– es expresión del compromiso por el bien común y de una visión integral del desarrollo humano. En particular, agradeció los avances en la inclusión de las minorías en el movimiento obrero y en la capacitación que empodera a quienes históricamente han sido marginados.

Una de las exhortaciones más enfáticas del Santo Padre fue la de acoger con generosidad a los inmigrantes y refugiados. En línea con la enseñanza de su predecesor, el Papa Francisco, León XIV pidió a los sindicatos “renacer cada día en las periferias”, es decir, situarse del lado de quienes viven en los márgenes y sufren exclusión. Solo desde ahí –recordó– es posible construir una economía verdaderamente humana, que no descarte a nadie y que reconozca la dignidad de cada persona, más allá de su origen, situación migratoria o nivel económico.

Al cerrar su encuentro, el Papa León XIV animó a los líderes sindicales de Chicago a aprovechar este tiempo de peregrinación no solo como un acto de fe, sino como un espacio de formación y reflexión sobre los derechos y deberes del mundo laboral. Sus palabras –difundidas por Vatican News– reafirman el papel central de los sindicatos en la visión cristiana de la sociedad: como actores de justicia, promotores de inclusión y verdaderos “lugares proféticos” donde se cultiva la esperanza de un futuro más digno para todos.

Fuente: Vatican News