Cien «sin techo» distribuyen el regalo del Papa en Plaza San Pedro

Gracias @Pontifex_es yo también tengo mi “Custodia el corazón”. pic.twitter.com/us3LNWOVu1

— Martha Calderón ن (@Calderon_Martha) febrero 22, 2015

23/02/2015 – Se titula «Custodia nuestros corazones» y es el nuevo regalo que Papa Francisco ofreció a los fieles que fueron a rezar con él a la Plaza San Pedro durante el ángelus del primer domingo de Cuaresma. Pero esta vez hay una novedad: entre los voluntarios que ayudaron a distribuírlos hubo cien personas sin hogar que viven en las calles de los alrededores del Vaticano y que reciben la ayuda de la Limosnería apostólica guiada por el obispo Konrad Krajevskj.

«Nosotros debemos convertirnos en cristianos valientes», se lee en la primera página del volumen de bolsillo. El Papa invita a los cristianos a ser valientes al practicar sus creencias. Y lo hace aconsejando que se dediquen a la formación de los corazones, para que sea más parecido al de Jesús, el Buen Pastor, que está representado en la portada del librito con una ilustración de los frescos de las catacumbas de San Calixto, en las que aparece con una oveja sobre los hombros y otras dos que lo miran desde abajo.

El nuevo libro de bolsillo regalado por Papa Francisco también reproduce algunos pasajes del mensaje de Jesús: las bienaventuranzas, sean perfectos, perdonen, acumulen tesoros en el cielo, no juzguen, hagan la voluntad del Padre. Mensaje que se encuentra resumido en el mandamiento nuevo que leemos en el Evangelio de Juan: «Así como los he amado yo, ámense los unos a los otros. En esto todos reconocerán que ustedes son mis discípulos».

Después hay una lista con los elementos esenciales de la fe: el Credo (en su forma más antigua del Símbolo de los Apóstoles) y los principales misterios de la fe; las virtudes teologales (fe, esperanza, caridad); los siete sacramentos; los diete dones y los doce frutos del Espíritu Santo; los diez mandamientos y lo scinco preceptos; las obras de misericordia corporal y espiritual; las cuatro virtudes cardinales y los siete vicios capitales. La fuente para las breves explicaciones que acompañan esta exposición es el Catecismo de la Iglesia Católica.

Francisco propone también dos prácticas espirituales tradicionales: la “lectio divina”, es decir la lectura de la Palabra de Dios para escucharla y asimilarla, y el examen de consciencia por la noche. El Papa describe estas prácticas usando las palabras de la “Evangelii gaudium” y de una de las homilías que pronunció en Santa Marta sobre «custodiar el corazón», para que no se convierta en una «plaza» en la que vayan y vengan todos menos el Señor.

El librito también indica «por qué confesarse, cómo confesarse, qué confesar», con la ayuda de 34 preguntas sobre el mal cometido y las omisiones: un útil “vademecum” que ayuda para llevar a cabo el examen de consciencia. Con esta iniciativa, una vez más, Papa Francisco, demuestra que considera fundamental el conocimiento de estas sencillas prácticas que pertenecen a la tradición de la Iglesia. En otra ocasión, Francisco ya había regalado a los fieles presentes en la Plaza San Pedro un Evangelio de bolsillo (y había invitado a leer un pasaje cada día). En diciembre del año pasado también regaló un librito con «la oración de los cinco dedos».

Fuente: Vatican insider  y Rome Reports