“Renovemos todos unidos el esfuerzo para remover las causas la esclavitud”

lunes, 13 de junio de 2016
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13/06/2016 – El Papa Francisco, recordando la Jornada Mundial contra el trabajo infantil, en el rezo del Ángelus de ayer dijo “Renovemos todos unidos el esfuerzo para remover las causas la esclavitud, que priva a millones de niños de algunos derechos fundamentales y los expone a graves peligros”.

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

Ayer, en Vercelli, fue proclamado Beato el sacerdote Giacomo Abbondo, vivido en el mil setecientos, enamorado de Dios, culto, siempre disponible para sus parroquianos. Nos unamos a la alegría a la acción de gracias de la diócesis de Vercelli. Y también de aquella de Monreale, donde hoy será beatificada la hermana Carolina Santocanale, fundadora de las Hermanas Capuchinas de la Inmaculada de Lourdes. Nacida en una familia noble de Palermo, abandonó las comodidades y se hizo pobre entre los pobres. De Cristo, especialmente en la Eucaristía, tomó la fuerza para su maternidad espiritual y su ternura con los más débiles.

En el contexto del Jubileo de los enfermos, se desarrolló en los días pasados en Roma un Congreso internacional dedicado a la curación de las personas afectadas por el morbo de Hansen. Saludo con reconocimiento a los organizadores y a los participantes y deseo un fructuoso compromiso en la lucha contra esta enfermedad.

Hoy se celebra la Jornada mundial contra el trabajo infantil. Renovemos todos unidos el esfuerzo para remover las causas de esta esclavitud moderna, que priva a millones de niños de algunos derechos fundamentales y los expone a graves peligros. ¡Hoy hay tantos niños esclavos en el mundo!

Saludo con afecto a todos los peregrinos llegados de Italia y de varios países para esta jornada jubilar. Les agradezco de manera especial, a ustedes, que han querido estar presentes en vuestra condición de enfermedad o discapacidad. Un sentido gracias también a los médicos y a los operadores sanitarios que, en los “Puntos de la salud” preparados en las cuatro Basílicas Papales, están ofreciendo visitas especializadas a centenares de personas que viven en los márgenes de la ciudad de Roma. ¡Muchas gracias también a ustedes!

Que la Virgen María, a quien nos dirigimos ahora en oración, nos acompañe siempre en nuestro camino.