30/03/2016 – A comienzos del siglo XXI, por diversos factores económicos, sociales y culturales, la adolescencia se prolongó y los hijos permanecen en la casa de sus padres más tiempo. Algunos especialistas denominan “síndrome del nido lleno ”, que se refiere a la permanencia en el hogar de los hijos que están en edad de independizarse.
En “Hoy puede ser” entrevistamos a Adriana Guraieb, Licenciada en Psicología, Miembro Titular de la Asociación Psicoanalítica Argentina y autora de numerosos libros quien nos decía que se trata de personas que tienen posibilidades para dar un paso de madurez en la independencia afectiva y económica pero no lo hacen. Son personas con inmadurez emocional.
La inmadurez emocional no tiene que ver con la edad. Si después de los 35 y 40 las personas quieren seguir viviendo como hijos cuando están en una instancia de ser padre claramente estamos frente a una situación de inmadurez emocional.
¿Qué responsabilidades tienen los padres? La licenciada decía que en muchas parejas se van avocando al concepto de familia parental y la familia conyugal va debilitándose. Toso o casi todo es en función de los hijos. Se planta la pregunta que conlleva una gran angustia “¿Que va a pasar si el hijo se va?”; queda un gran vacío.
La maduración emocional está atravesado por la cultura en la que está la persona, agregó Guraieb.
Te invitamos a escuchar la entrevista completa.
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