06/08/2021 – En el mes de julio pasado el Gobierno Nacional comenzó a trabajar en un programa de empleo para combinar planes sociales con trabajo formal.
La propuesta que ya terminó de delinear el Ministerio de Desarrollo Social consistirá en que una persona con un plan social no lo pierda cuando consigue un trabajo formal por un período de hasta 8 meses.
La iniciativa beneficia al trabajador, debido a que le da estabilidad de ingresos más allá de lo que ocurra con su trabajo formal y, a la empresa, debido a que el pago del plan se descuenta del salario formal, por lo que el Estado subsidiará una parte del salario del sector privado.
Los “planes” a los que se refiere son los que están enmarcados dentro del llamado Potenciar Trabajo, que alcanza a casi 1 millón de personas, y que engloba en un mismo programa planes anteriores como el Argentina Trabaja o Hacemos Futuro.
El miedo a perder los planes sociales a afectado muchos sectores laborales como Pymes y comercios pero, el trabajo rural, sobre todo en el interior del país se ha visto particularmente afectado ya que, los trabajadores temporarios que trabajan en el levantamiento de cosechas o recolección de frutas y verduras prefieren quedarse con el plan que presentarse a trabajar en una labor que no es bien pagada.
En este marco, la Senadora Nacional por Salta, Nora Giménez, está impulsando un proyecto de ley para compatibilizar el empleo rural temporario registrado con los diferentes planes sociales que otorga el gobierno nacional.
La medida tendría vigencia por un plazo de dos años, período en el que se espera que haya una reactivación económica sostenida luego de la pandemia. Estuvimos en contacto con la Diputada Giménez quien nos dio mas detalles de su propuesta.
La importancia de mantener estas ayudas y planes sociales se a vuelto más relevante en tiempos de pandemia para muchos sectores que se han visto imposibilitados de realizar su trabajo, muchos de ellos informales, en el periodo de aislamiento.
Según Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina, sin la implementación del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y la tarjeta Alimentar, la pobreza extrema se habría “duplicado” el año pasado, en medio de la primera ola de la pandemia.
Los dichos de Salvia se dieron en el marco de la presentación del informe “Un rostro detrás de cada número. Radiografía de la pobreza en Argentina”, que la UCA hizo en forma conjunta con Cáritas Argentinas, en vistas al lanzamiento de la tradicional Colecta Anual en forma presencial en el mes de junio pasado.
Para hablar sobre este aspecto del tema nos contactamos con Ianina Tuñón, responsable de trazar el mapa de la pobreza infantil para el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina.
Podés escuchar las notas completas en la barra de audio ubicada bajo el título