“A las chicas no las juzgamos, las abrazamos”, dijeron desde el hogar Lourdes de Villa Soldati

martes, 6 de septiembre de 2022
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06/09/2022 – En el ciclo donde seguimos conociendo la obra del Hogar de Cristo en Argentina dialogamos con Carla Vazquez, coordinadora del hogar Madre de Lourdes del barrio de Villa Soldati en la ciudad de Buenos Aires, y con Paola Groh, quien está internada en el hogar hace tres meses y hace el acompañamiento de la casa. Paola está en recuperación y es una madraza dentro del hogar dedicado exclusivamente para mujeres en la Capital Federal. “Somos tres madrazas aquí. Yo soy marplatense, hace 8 meses llegué a Buenos Aires buscando a mis tres hijas que están en González Catán con mi suegra. En Lourdes encontré un hogar, una familia, y tengo la esperanza de recuperar a mis hijas, confío en Dios. Reencontrarme con ellas será tocas el cielo con las manos”, dijo Groh

Vázquez añadió: “Lourdes abrió en plena pandemia, en el 2020, por iniciativa del padre Damián Reynoso, párroco de San Francisco de Asís del barrio de Villa Soldati. A las chicas no las etiquetamos, no las juzgamos. Se recibe la vida como viene no importa si son adictas o prostitutas”. Luego Carla hizo un breve recorrido por la historia del hogar: “Fue pensado para y exclusivamente mujeres, con problemáticas de consumo ya que somos unos de los sectores de esta sociedad más vulnerables e invisibles por el mandato machista al cual fuimos criadas, el bagaje que lleva cada mujer en su vidas e historias son enormes. Todo comienza con la llegada del Padre Damian en el mes de marzo, comenzó saliendo en bici bien temprano repartiendo mate cocido a las pibas de “La av roca” si a ellas, que nadie las miraba ese trabajo fue de hormiga y a puro pulmón. La realidad y necesidad sale a la luz ya que a muchos le incomoda verla y así el hogar abrió sus puerta en plena pandemia, donde todo se cerraba una luz de esperanza comenzaba a brillar, no nos paró ni el covid realmente recibimos a todas el verdadero cuerpo a cuerpo más que nunca”.

“Comenzó con la llegada de las chicas a la parroquia se inventaron habitaciones en un container, luego fueron llegando más chicas y se alquiló una casita en el barrio pero la familia fue creciendo demasiado rápido para bien hoy tenemos nuestro propio lugar con mucho esfuerzo y sacrificio tenemos todo lo que tiene que tener una casa nuestro hogar donde vivimos en familia con todo lo que implica ser una gran familia. El enfoque que tiene el hogar es que puedan manejar las riendas de sus vidas, que esta maldita enfermedad deje de manejarlas, que sean independientes y que se valoren como mujeres dignas que son, el hogar tiene cuatro pilares, la Fe, la confianza en sí misma y al prójimo, el trabajo en equipo, el amor y la escuchas son nuestros pilares. El hogar apunta a darle la dignidad que fue arrebatada por el consumo, poniendo el foco en la salud, educación y trabajo”, indicó Vázquez.