Claves para discernir mejor posturas y actitudes ante la pandemia y las vacunas

16/08/201 – Cada vez que hablamos de las vacunas contra el coronavirus, es bueno aclarar que, las estadísticas oficiales de países que tienen una alta tasa de vacunación, las vacunas no impiden que las personas se contagie (sobre todo en los países donde hay circulación comunitaria de la variante Delta, pero sí impiden que los cuadros de Covid-19 se agraven al punto de hacer necesaria una internación.

Por esta razón, en países como el Reino Unido, Israel y Estados Unidos, entre otros, tienen hoy muchos contagios pero muchas menos internaciones y muchos menos fallecidos que en las olas anteriores de contagios.

A pesar de esto, por diversas circunstancias y razones, hay personas que no quieren colocarse la vacuna. Y, en general todos los estudios de opinión pública que se han hecho a nivel internacional coinciden en que hay tres o cuatro grupos de personas que pueden clasificarse según su postura ante las vacunas contra el Covid: un grupo A dispuesto a colocarse de inmediato la vacuna que le ofrezcan porque confía plenamente en el sistema científico tecnológico, un grupo B  de personas que tienen dudas pero que, a pesar de esas dudas, optan por vacunarse porque consideran que es, por ahora, la única forma de afrontar la pandemia, un grupo C integrado por quienes, como consecuencia de sus dudas, no quieren vacunarse y un grupo D que es minoritario, pero que se hace sentir porque toma posturas y mensajes agresivos, y que no se vacuna y milita por la no-vacunación, con argumentos de todo tipo, desde algunos que pueden ser razonables o comprensibles, hasta los que argumentan las teorías conspirativas más rebuscadas.

Ante esta circunstancia, desde Radio María Argentina nos pareció apropiado plantear o buscar  claves éticas que nos ayuden a discernir mejor nuestra postura.

Por eso convocamos al padre obispo Pedro Torres, obispo auxiliar de Córdoba, a quién le pedimos que nos ayude a reflexionar sobre estas cosas porque él ha estudiado mucho teología moral, integra diversos organismos vinculados con la bioética, y está en permanente contacto con médicos y científicos de distintos ámbitos.

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