13/02/2015 – El 14 de febrero, los enamorados celebran su día, conocido también como el día de “San Valentín”. La consigna es “celebrar el amor”, pero ¿de qué hablamos cuando hablamos de amor?
Según San Juan Pablo II “el amor es la respuesta que jóvenes y adultos buscan hoy a su anhelo de vivir amores sólidos, es decir: amores enteros, conservables, desarrollables, restaurables, durables. Es que, el amor sólido hace más profunda y posible la felicidad en la relación hombre- mujer. Amores líquidos, reducidos, estancados y con plazo de vida inciertos, constituyen una de las causas principales de la crisis contemporánea del matrimonio y la familia. Mucho dolor humano y también muchos trastornos físicos, afectivos y espirituales derivados de ese amor débil, podrían evitarse brindando a las nuevas generaciones la educación para el amor sólido.”
No obstante vivir el Amor Sólido es comprender que el amor es un desafío. Que podemos fallar, una y otra vez. Y, a la vez, que ésa no es razón para dejar de intentar dar lo mejor de nosotros. Implica aceptar, como mujeres y varones, que necesitamos del otro, y que nos hacemos felices cuando recibimos al otro y nos entregamos a él.
De este tipo de amor sólido hablamos en “Entre Nosotros” con Agustín Pearson, presidente de la fundación “Hacer Crecer” constituida por un grupo de personas (parejas de novios y matrimonios, sacerdotes, psicólogos) que a partir de la propia experiencia, han sentido el llamado a hacer una propuesta de acompañamiento a todos aquellos que viven ésta realidad.
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