Dios está enamorado de la humanidad

lunes, 6 de marzo de 2023
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06/03/2023 – En el ciclo “Música y Anuncio”, el cantautor mendocino Mariano Durán presentó a la pasión de Cristo como la entrega de un Dios enamorado de la humanidad. “Les quiero proponer ver el momento de la Pasión de Cristo con otra mirada, desde otra perspectiva, que estoy seguro les ayudará a vivir esta próxima Semana Santa de manera distinta. Dice el libro del Apocalipsis en el capítulo 19: Alegrémonos, regocijémonos y demos gloria a Dios, porque han llegado las bodas del Cordero: su esposa ya se ha preparado, y la han vestido con lino fino de blancura resplandeciente». El lino simboliza las buenas acciones de los santos. Después el Ángel me dijo: Escribe esto: Felices los que han sido invitados al banquete de bodas del Cordero”. Y luego, en el capítulo 21 dice: “Luego se acercó uno de los siete Ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete últimas plagas, y me dijo: «Ven que te mostraré a la novia, a la esposa del Cordero». Me llevó en espíritu a una montaña de enorme altura, y me mostró la Ciudad santa, Jerusalén, que descendía del cielo y venía de Dios”. Lo primero que descubrimos es que las escrituras, no es otra cosa más que una historia de amor, un Dios enamorado que está dispuesto a hacer lo que sea necesario por ganar nuestro corazón para tenernos junto a él para siempre”, sostuvo Durán.

“Una historia de amor que concluye en una boda, las bodas del Cordero, tal como lo hemos escuchamos en esta lectura del Apocalipsis. Es Dios buscando a la novia. Enamorándola. Preparándola. Este casamiento del que habla la Palabra de Dios es el de la Iglesia con su Dios. ¿El novio quién es? El Cordero, el novio es Jesús. La novia es la Iglesia, y la Iglesia somos cada uno de nosotros. Entonces, la Novia sos vos, la Novia soy yo, y la Novia sos vos que estás escuchando también. Pero para que podamos entender esta historia, tenemos que comprender que Dios, habla al mundo a través de la propia cultura del lugar. Lo mismo sucede y ha sucedido con las apariciones de la Virgen María. Y quiero explicar un poquito cómo era la cultura de los judíos, que fue el pueblo que Dios que escogió, todo lo que significa la preparación de una boda. Lo primero que hace un hombre judío para contraer nupcias, tiene que salir a buscar a la novia. El lugar donde se suelen buscar a una mujer para hacerla su esposa es en los pozos, porque es el lugar donde las mujeres van a sacar agua”, remarcó.

“ Y ahí es donde pueden encontrar a su enamorada. Una vez que la encuentran, y se gustan, el novio lo que hace es buscar un mediador, una persona que sea el mediador de ese compromiso que él quiere hacer con ella. Así como hoy vamos a la casa de la novia para pedir su mano e iniciar un compromiso formal; así se buscaba un mediador que acompañaba al novio hasta la casa de la novia. Este mediador tenía que llevar un contrato escrito. Un contrato donde cada cláusula servía para proteger este compromiso. Y el mediador tenía que darse a la tarea de vigilar que se cumpliera de ambas partes, tanto del novio como la novia, cada cláusula. Si la novia y la familia de la novia aceptaban este contrato, lo que se hacía era sellar ese momento con una alianza. Levantaban una copa con vino y ese era el signo de que esa alianza quedaba sellada”, manifestó el cantautor de San Rafael.

“A continuación, lo que hace el novio es decir “me tengo que ir a preparar el regalo para ti”. Normalmente aquel regalo que se daba era la casa donde iban a vivir. Así es que el novio se retiraba, y no sabía cuánto tiempo iba a tardar. Podría tardar hasta a veces 6 meses, a veces un año, el tiempo que fuera necesario. El único que sabía cuándo debía regresar el novio era el padre del novio. Porque el padre supervisaba que la casa en la que vivirían, estuviera perfectamente bien, cuando todos los detalles estaban listos es cuando el padre daba la autorización para que el novio fuera a buscar a su amada. Solo que, si el novio era pobre, entonces el padre le prestaba el lugar donde vivía para que él pudiera construir una habitación ahí, en su casa, en la casa del padre. Así es que nadie sabía más que el padre cuándo el novio iba a regresar. Mientras tanto, la novia no perdía el tiempo, desde el día del compromiso, la novia tenía un ritual, todos los días tenía que bañarse con un agua a la cual le llaman agua viva. Un agua donde ella se purifica todos los días y se viste de novia, porque al no saber cuándo vendrá el novio, ella tiene que estar preparada para el día en que él llegue”, dijo Mariano.

“Finalmente, cuando el novio va a buscar a la novia, va con su atuendo de novio. Este atuendo se componía de 2 partes, una túnica que tenía una particularidad, era una túnica de una sola pieza y de color púrpura. Esta túnica tiene un significado muy bonito, representa al sacerdote, aquel que ofrecía sacrificios para Dios. Entonces, significa que el novio vestido de esa túnica púrpura de una sola pieza le estaba diciendo, yo voy a ofrecer todos los sacrificios necesarios para hacerte feliz. Y el atuendo del novio llevaba además un segundo elemento: una corona. Porque también estaba vestido de rey y el significado también es muy bello. Porque al llevar esa corona le está diciendo “yo seré el único rey que reinará en tu corazón”. Así es que al llegar a la casa de la novia para poder tomarla y llevarla, en todas las familias judías se tenía que pagar un precio, lo que se llama el precio del rescate. Entendiendo y conociendo estas costumbres judías entenderemos lo que Dios ha hecho en la historia de la salvación”, subrayó.

“El plan de Dios es que nuestra felicidad sea eterna, sea por siempre, sea verdadera y sea plena. ¿Se acuerdan del atuendo del novio? Bueno, cuando llega el momento de la pasión de Jesús, cuando fue mandado Jesús a flagelar, los guardias le pusieron una túnica de color púrpura de una sola pieza, los guardias sin saber, le acaban de poner el atuendo del novio a Jesús. Y no es casualidad, todo está perfectamente planeado, cada detalle es cuidado por Dios. El otro atuendo que debía llevar el novio era la corona, y a Jesús le colocan la corona de espinas, y ahora sí Jesús está completamente vestido de novio. Cuando llega Jesús por la novia, el padre de la novia, que es la maldad, que es el pecado, que es Satanás que nos tiene esclavizados, le pide un precio muy caro por nosotros. La historia de la salvación terminará con una boda entre el cordero y la iglesia”, concluyó Durán.