08/10/2021 – El padre Ángel Rossi nos acompañó un vez más con su reflexión en el marco del Año Jubilar Ignaciano.
“Una de las más grandes enseñanzas de San Ignacio es cómo luchar contra algo que se da en nuestro corazón y que Ignacio llama la ‘desolación’, es decir, esos estados del alma en donde somos tentados, a veces en cosas puntuales, otras veces son como estados del alma que pueden durar un tiempo”.
“La misma palabra ‘desolación’ lo dice: es estar solos o creer o sentir que lo estamos, aunque Dios no nos suelta de la mano. San Ignacio define la desolación describiéndola: ‘Oscuridad en el alma, turbación, atracción a cosas bajas y mundanas, inquietud por abundantes y variadas agitaciones y tentaciones que nos mueven a desconfianza, a desesperación, a frialdad, de tal manera que el alma se encuentra o se siente toda tibia y como separada de Dios‘.”
En tiempo de desolación Ignacio dice ‘no haga mudanza, no deje los propósitos grandes, esté en paciencia, –no sólo tenga paciencia sino ‘esté’ en paciencia- y ponga los medios para disponerse para que Dios nos consuele.”
P. Ángel Rossi (SJ)
Podés escuchar la reflexión completa en el audio que acompaña esta nota
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar | Incrustar
Suscríbete: RSS