El legado de Francisco sobre la Justicia y la Paz

miércoles, 30 de abril de 2025

30/04/2025 – El legado del Papa Francisco sobre la paz y la justicia es un faro de esperanza en medio de la oscuridad. Humberto Podetti, miembro de la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Argentina, en esta nota, nos invita a reflexionar sobre las semillas que el Papa Francisco sembró y los desafíos que nos dejó para construir una nueva sociedad humana.

«Papa Francisco nos ha dejado verdaderas semillas que tendremos que ir aprendiendo poco a poco a acompañar para que pueda ir creciendo con la gracia del Espíritu Santo», afirma Podetti al inicio de esta charla. Y es que el panorama mundial actual es más complejo que en 2013, con un aumento alarmante de conflictos bélicos y gasto en armamento. Sin embargo, Francisco logró algo inédito: unificar el clamor de los pueblos y el mensaje espiritual de los líderes religiosos de diversas tradiciones, desde el diálogo con el gran teólogo sunita Ahmed el-Tayeb hasta encuentros con budistas e hinduistas.

Este diálogo ecuménico e interreligioso sin precedentes reveló un dolor mundial por su partida, pero también una esperanza y un compromiso global de seguir trabajando por la paz y la justicia. Francisco nos devolvió la esperanza en el tiempo, invitándonos a iniciar procesos para construir un futuro con sentido, en contraposición a un presente continuo y angustiante que olvida el pasado y el porvenir.

Según Podetti, el legado central de Francisco radica en llevar a la práctica el principio del Concilio Vaticano II de la Iglesia como Pueblo fiel de Dios. El Papa escuchó el clamor de los pueblos y de la naturaleza, traduciéndolo en mensajes sencillos y accesibles para todos. Un rasgo distintivo fue su uso del castellano, la lengua mestiza de América Latina, y su capacidad para oír tanto la voz de las organizaciones como el clamor de las multitudes. «La fe siempre es comunitaria, siempre es social, siempre es popular, siempre es de un pueblo que camina en marcha», recordó Podetti citando la primera encíclica del Obispo de Roma.

¿Y cuáles son los desafíos concretos que Francisco dejó a la Comisión de Justicia y Paz en Argentina? Podetti señala tres prioritarios: la dignidad de la persona humana, luchando contra la trata y buscando el trabajo digno para todos; el acceso a los bienes básicos como la tierra y el techo. POr otro lado aseguró que el fortalecimiento de la democracia, salvando las fracturas internas y promoviendo un lenguaje de propuesta en lugar de violencia y crítica es muy importante: «Es muy difícil decir que hay democracia si hay gente que tiene hambre, si hay gente que no tiene posibilidad de trabajar, si hay gente que no tiene acceso a la educación, a la salud, a los bienes», sentenció el entrevistado.

Francisco no solo denunció las injusticias, sino que propuso caminos de salida, como la encíclica Laudato Si’, dirigida a todos los habitantes del planeta, invitándolos a un diálogo global.