El testimonio de las familias misioneras

jueves, 18 de marzo de 2021

18/03/2021 – Esta vez fue el turno de las familias misioneras en la tarde la de la Radio. Elba Gómez y José Echavarría, junto a sus hijos Agustín, Guadalupe y Matías, conforman junto a dos hermanos más la familia que coordina diocesanamente en Corrientes la actividad. Matías Echavarría comenzó compartiendo cuál fue el inicio de la misión: “Todo empezó cuando era muy chicos con mis hermanos misionábamos en le barrio donde vivimos en Corrientes. De a poco nos integramos a la parroquia Jesús Misericordioso hasta que en el 2006 nos integramos a un grupo misionero con foco en la Divina Misericordia. Nuestra misión la realizábamos en el interior de la provincia y provincias. Toda la familia íbamos a misionar, yo comencé a los siete años, mi hermano más chico lo hizo a los cuatro años”

Luego, el padre de la familia, José, contó como pasaron a formar las “FaMis” correntinas: “El tema de ser familia misionera surgió casi sin pensar, se fue dando. Realmente con la vida familiar, más el trabajo y sumado a la misión, en un momento pedimos un año sabático. Pero el director diocesano de la arquidiócesis nos pidió que asumamos formalmente la animación de las familias misioneras, armar grupos que tuvieran esta inquietud en forma familiar. Organizamos retiros kerygmáticos para familias, donde sus integrantes se fortifican interiormente y descubren el llamado a llevar a Jesús a otros. El centro del kerygma es que esas personas que sepan que Dios nos ama tal como somos”. También sostuvo que “la familia cristiana es misionera o no es nada, como decía san Juan Pablo II”.

Luego Guadalupe destacó lo que realizan en retiros y jornadas: “Cuando nos trajeron la propuesta desde Paraguay, adaptamos esto a nuestra realidad familiar. Originalmente era solo para adultos, pero no los jóvenes y los niños. Nosotros los incluimos, pero cada por grupo de edad. Así son nuestras jornadas y nuestros retiros. Todo desde el kerygma y favoreciendo el diálogo familiar”. También otro de los hijos, Agustín, sumó la experiencia de lo virtual en la pandemia: “Los adultos fueron los primeros que decidieron usar las redes sociales para rezar juntos. Pero esto rápidamente se trasladó a nosotros, a los jóvenes. Y gracias a Dios, en el 2020 las familias misioneras de Corrientes estuvimos muy activas a través de las redes. Crecimos y seguimos creciendo como comunidad de distintas edades y realidades, la pandemia no nos detuvo, para nada”.

Finalmente, la mamá, Elba, expresó: “En el 2020 acompañamos mucho a los grupos de la provincia con sus fiestas patronales desde la virtualidad. Y en este año esperamos abrirnos a otras comunidades. Ahora estamos acompañando la novena a san José de distintas comunidades y preparando la fiesta de la Anunciación del próximo 25 de marzo. Yo desde muy joven era misionera y esto no dejé de hacerlo cuando me casé y formamos nuestra familia con José. En nuestra familia nunca estamos aburridos”.