Las bienaventuranzas de la misericordia

jueves, 18 de febrero de 2016

lavar los pies (2)

Bienvanturado serás si con frecuencia, traspasas el umbral de la Puerta Santa para orar, reconciliarte con el Señor y los hermanos; para participar de la eucaristía y practicar las obras de misericordia, porque serás grato a los ojos de Dios.

Bienaventurado quien se siente pecador, le duele el pecado, porque ya abrió la puerta a su sanación.

Bienaventurados los que perdonan y olvidan, porque ni lo mucho les será tenido en cuenta, pues Jesús nos enseñó: perdona nuestros pecados, como nosotros también perdonamos. (Lc.11.4).

Bienaventurado el que cree que la misericordia de Dios perdona todos los pecados, porque lo celebrará con filial agradecimiento.

Bienaventurados quienes confiesan y aceptan, que el perdón de Dios llega por medio de sus ministros, los sacerdotes, porque su fe y humildad les dovolverán la inocencia.

Bienaventurado quien practica y difunde la devoción a Jesús Misericordioso, porque un día oirá: Hoy, estarás conmigo en el paraiso. (Lc.23, 43).

Bienaventurados los hogares en los que los hijos crecen rodeados de diálogo, gestos de servicio y de perdón, porque la convivencia, la solidaridad y la misericordia, constituirán la rica herencia de su prole.

Bienaventurado quien educa desde la misericordia y la comprensión, porque será padre, madre de muchas sonrisas.

Bienaventurados los devotos de María, Madre de la Misericordia, porque poseerán un corazón tierno y compasivo.

Bienaventurados, quienes como la Samaritana, (Jn. 4.1ss), se dejan interpelar por Jesús y comparten con su vecinos el mensaje del Maestro, porque serán misioneros de la misericordia.

Bienaventurados quienes viven en clave de reconciliación, porque la muerte les sorprenderá purificados.

Bianeventurados los misericordiosos, porque hallarán misericordia, dice el Señor. (Mt.5,7).

 

Hno. Eugenio Magdaleno
San Rafael, enero del 2016

Para la reflexión:

+ La lectura de las Bienaventuranzas, ¿qué sentimientos despiertan en tu corazón?: esperanza – temor – alegría – apertura de corazón – consuelo – amor filial a Dios, etc. ¿Por qué?

+ ¿Con qué Bienaventuranza te identificas más, responde mejor a tu radiografía interior, aquí y ahora? ¿Cuál de ellas necesitas practicar más en tu vida?

+ Toda sanación, perdón personal conlleva una dimensión solidaria, comunitaria, ¿qué Bienaventuranzas están abiertas a la fraternidad, la hermandad, la comunión con la Iglesia, con el mundo?

+ ¿Qué tendrías que agradecer a Jesús Misericordioso fuente y razón de todo perdón?; ¿con qué gesto, oración u acción?