María, Madre del consuelo

sábado, 26 de febrero de 2022
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26/02/2022 – Como cada sábado nos detuvimos en una virtud de María y lo hicimos de la mano de Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolbe.

Hermana Angélica nos invitó, en esta oportunidad, a contemplar a María en su expresión maternal de Consoladora.

“En el sufrimiento, la incertidumbre, la duda Dios se manifiesta como el Dios de toda consolación (2 Cor 1, 3). El desconsuelo humano abre su corazón a la dimensión consoladora de Dios: ‘Como una madre consuela a su niño así os consolaré Yo‘ (Is 66, 13-15). Consolar por lo tanto es hablar al corazón de la persona. Consolar es mucho más que aliviar las penas. El mayor consuelo es la certeza del amor infinito que Dios nos tiene, un amor que penetra lo más profundo de nuestro ser.”

“Mirando a María ¿nos encontramos deseando que Ella sea quien mire nuestro corazón, cargado de rostros y de historias sufrientes?. Tantos hermanos y hermanas con problemas de salud, lastimados corporal y moralmente . Que vuelva “sus ojos misericordiosos” a este nuestro siglo, donde la humanidad continúa sufriendo marginación, soledad, injusticia, tristeza; está herida: muchos hombres y mujeres en todas las latitudes sufren dolor y desconsuelos de todo tipo.

“Ella, como “Madre del consuelo” corre presurosa a estar en casa, en mi casa, en la tuya, en la de todos -sirviendo a su manera silenciosa y discreta – como lo hizo con su prima Isabel. Está allí, al pie de la cruz recibiendo en el Hijo a todos los hijos sufrientes ¡que son tantos!”

“María Santísima es Madre del Consuelo en nuestro peregrinar en el destierro hasta la casa del Padre. Junto a Ella, Dios nos llama a cada uno a ser instrumentos de su consolación al mismo tiempo que abrazamos nuestras propias cruces.

Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolbe

Podés escuchar la reflexión completa de Angélica Diez en el audio que acompaña esta nota