María, Reina de la Paz

lunes, 14 de marzo de 2022
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12/03/2022 – En “Madre del pueblo” hacemos nuestro camino cuaresmal de la mano de María. En esta oportunidad Angélica Diez, misionera de la Inmaculada Padre Kolbe, nos invitó a contemplar a María como “Reina de la Paz”:

María es venerada como “Reina de la Paz” por su íntima y estrecha relación y cooperación con el Hijo, “Príncipe de la Paz”, en la reconciliación entre Dios y los hombres, que Él realizó.

También en el misterio de la Encarnación, al recibir el anuncio del ángel Gabriel, concibió en su seno virginal al Príncipe de la Paz, el cual nos devolvió la paz y reconcilió consigo el cielo y la tierra.

Maria es “Reina de la Paz” en el misterio de la Pasión, es la Madre fiel que se mantuvo en pie junto a la cruz de su Hijo.

Y en el misterio de Pentecostés, la santísima Virgen con los Apóstoles, esperó el Espíritu de la paz, de la unidad, de la caridad y del gozo.

En  todos  estos  acontecimientos salvíficos Ella está presente y activa colaborando con su Hijo, “Príncipe de la Paz”, por eso sería bueno preguntarnos: ¿tengo  motivaciones reales  para  realizar  mi  trabajo,  mi  apostolado como  instrumento  de  paz   entre  y  por  los hermanos?

Cada  día  que  amanece  nos  ofrece  muchas oportunidades para cultivar la mirada del corazón, que se conmueve ante el dolor y la tristeza, la  falta de medios, de recursos necesarios… Traigamos  a  la memoria la presencia de  María en las bodas de Caná, faltó el vino. Ella atenta y con mirada de misericordia con plena y total confianza acude  al  Hijo: “No tienen  vino”.  Y la  respuesta llega…  hay  vino,  hay  sorpresa,  hay  esperanza: ¡ vuelve  la  paz!

El papa  Francisco  en  un  Encuentro con niños en el Vaticano, el 11 de mayo de 2015  les  decía: “La paz auténtica es trabajar para que todos encuentren solución a los problemas, a las necesidades, que tienen en su tierra, en su patria, en su familia, en  la sociedad. Así se construye la paz  «artesanal».  Cada acción y cada gesto de ustedes hacia el prójimo puede construir la paz. El auténtico constructor de la paz es el que da el primer paso hacia el otro. Y esto no es debilidad, sino fuerza, la fuerza de la paz”.

Finalmente podemos reflexionar con esta pregunta: ¿a qué  me  invita  María  hoy?

Quizás  a  crecer  en  un  ofrecimiento más “descentralizado de los nuestros”-  sin  olvidarlos- , extender “el  radio“ de  acción de la oración para implorar ayuda de la Madre que  nos  lleve a vencer las dificultades y a agradecerle su presencia y cuidado maternal en cada momento de nuestras vidas y en la vida de los demás.

¿Qué le diremos nosotros, hoy a María? ¡Queremos junto a Vos, ser  constructores  de paz!

¿Lo  intentamos mirando  a  María, Reina de la Paz?

Angélica Diez

Podés escuchar la reflexión completa de hermana Angélica Diez en el audio que acompaña esta nota