Monseñor Angelelli: “Su objetivo fue conectar el Concilio Vaticano II con la realidad concreta de La Rioja” – Fray Martín Bitzer

jueves, 1 de noviembre de 2018

01/11/2018 – Fray Martín, Vicepostulador de la causa de los mártires riojanos, reflexionó en torno al contexto social del momento en que Monseñor Angelelli llega a La Rioja. Lo primero que dijo fue que “Monseñor Angelelli antes había sido elegido obispo auxiliar de Córdoba en 1960, así que ya venía entrenado, ya venía trabajando en las barriadas, encontrando a los estudiantes, a los obreros católicos, había sido nombrado como asistente espiritual del Consejo de los universitarios de la Acción Católica Argentina. Y siendo obispo auxiliar, ya estamos en el año 1963 -agregó- es asistente de la junta arquidiocesana y rector del Seminario mayor de Ntra. Sra. De Loreto, en Córdoba , así que ya venía con mucha responsabilidad, venía entrenado en varios ámbitos”, señaló.

“Un hombre que había estudiado muchísimo, había participado en distintos eventos internacionales en Roma, había participado en tres sesiones del Concilio Vaticano II, siendo obispo auxiliar ya de Córdoba”, destacó Fray Bitzer.

“Apenas toma posesión como obispo de La Rioja, dice: <Vengo como un riojano más>, recordó Fray Martín.

Tenía un oído al Evangelio y al magisterio eclesial, y otro al pueblo, como él solía decir. Efectivamente, tenía el oído muy afinado, una capacidad de escucha increíble“.

En este sentido, “Lo primero que se propone es conocer la diócesis. Por ello, Monseñor Angelelli convoca a unas jornadas de reflexión. Su objetivo fue conectar el Concilio Vaticano II con la realidad concreta de La Rioja”.

¿Cuál fueron las consecuencias de estas jornadas de reflexión y oración?

Cabe recordar que “Las jornadas se desarrollaron en el mes de septiembre, y el primero de octubre de 1968, el mismo año en que Monseñor Angelelli asume como obispo de La Rioja, ellos dirigen este mensaje:

<Al finalizar estas jornadas de oración, estudio y reflexión sobre la realidad concreta de La Rioja, de nuestra misión pastoral a la luz de la Doctrina y del Espíritu del Concilio Vaticano II, tal como fueron asumidos por el Episcopado latinoamericano, el obispo y su Consejo prebisterial como cuerpo sacramental unido, hacemos partícipes de los frutos de estas jornadas>”.

“Lo primero que hizo -subrayó- fue escuchar, conocer la realidad que le tocaba pastorear. No empezó a hacer, sin saber primero las necesidades del lugar”, acertó Fray Martín.

En ellos se cumple lo primero que dijo Carlos de Dios Murias cuando llegó a La Rioja:

“Más vale morir joven habiendo hecho algo por el Evangelio, que morir viejo sin haber hecho nada”.

Para más información sobre los mártires riojanos: www.martires.org.ar