21/07/2018 – El actor y cantante José Luis Serrano fue el invitado este sábado en el espacio de la “Oración Misionera”, dejándonos su testimonio de vida y su encuentro con el Señor. Y comenzó recordando cuando fue invitado a actuar en la ciudad bonaerense de Luján con su personaje de Doña Jovita: “Yo pense, ¿a quién le puede interesar que la viejita toque en Luján? Y me di cuenta que era la Virgen la que me convocaba. A veces me siento que soy un hijo que no la merece, pero siempre aparece Ella como Madre que me ayuda. Y yendo en un auto entre Buenos Aires y Luján le compuse estos versos a la Virgen”.
Y Serrano interpretó esto:
Ay, ay… madrecita linda Maria de los caminos la misma de Nazareth La refugiada en Egipto
Ay, ay… lucesita gaucha, La que en Belén ha parido Mamita de los desiertos, envión de los peregrinos
Abraza mi chiquitura y este poncho malherido tu que conoces de pena y que has probado el exilio
Por estas pampas tu paso se hizo ternura en tus hijos y en Lujan bajo un alero tu corazón hizo nido
El que latió silencioso estrujado de alaridos bajo la cruz esa tarde que agonizaba tu niño
Pero el Amor otra vez como siempre lo ha podido y con ternura de madre nos saca del extravío
Caen los muros, y la luz habla de un gozo infinito en los gestos cotidianos en el abrazo sencillo
ya no hay sombras y la cruz andando tiene sentido por que lo quieto es la muerte por que el amor es lo vivo
María la de Lujan inspíranos yo te pido nos hace falta una patria y un destino compartido
Serrano agregó luego que “tener conciencia de la propia vulnerabilidad es desde donde se agradece la vida”. También recordó una anécdota con Atahualpa Yiupanqui. “En el año 1980, yo había ganado un premio que consistía en grabar un disco. Y como no sabía que contenido darle logré entrevistarme con Yupanqui. Cuando iba a mostrarle el repertorio, me dio cierto pudor. Y me salió decirle: ´Yo lo conozco a Di Fulvio`. Y él me dijo: ´Usted conocerá a mucha gente, a Di Fulvio, a Mercedes Sosa, al Chango Nieto, pero lo que está buscando está dentro suyo`. Con esa frase, Don Ata me marcó un hito en la vida. Yupanqui es un hombre que dejó una huella profunda”.
Serrano sostuvo también que “nuestra cultura y nuestra identidad están amenazadas. Por eso a mi me gusta crear y cantarle a los personajes que nos representan. Y así nació esta zamba para la beata Mama Antula”. E interpretó esta canción:
Ella descubrió en el monte su mejor estrella Cuando se sintió llamada Siendo muy pequeña Descalza y enamorada fue a rodar la tierra Para contar a todo el mundo Buenas nuevas
Ella salió de Santiago Con la primavera Cuando Ahuyentaba el frío De la peor pobreza Soñaba una patria grande Sin las penas viejas Cuando Buenos Aires Era tan ajena
Ella es la Mama Antula La flor santiagueña guapa Madre del coraje compasión y entrega Acerca la luz de tus ojos por que mis tinieblas necesitan fuego del amor que quema
Gloria por cruzar los tiempos por ser la pionera cuando de los olvidados fuiste quitapenas alegre pusiste la chispa con la luz perfecta para que la cruz trascienda la madera
Mama ruega por nosotros desde tu trinchera Antula de los pasos firmes y alegría plena Reparo De los corazones Que no tienen vuelta Aquí está tu pueblo Esta es nuestra tierra
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