Por las “sendas interiores” de Don Atahualpa Yupanqui

domingo, 22 de mayo de 2011
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El cielo. Atahualpa Yupanqui

"En lo alto de la sierra
me detuve a descansar;
pero sentí que me iba…
sin moverme del lugar.

Los ojos se me perdieron
en aquella inmensidad,
y me olvidé de mí mismo
tanto mirar y mirar.

De pronto me ha preguntado
la voz de la soledad
si andaba buscando el cielo.
Y yo respondí: quizá…

El cielo está adentro de uno
y está el infierno también.
El alma escribe sus libros
pero ninguno los lee.

A veces uno camina
entre la sombra y la luz.
En la cara la sonrisa
y en el corazón la cruz.

Búscalo al cielo en ti mismo
que allí lo vas a encontrar.
Pero no es fácil hallarlo
pues hay mucho que luchar.

Caminos de ingratitudes,
de incomprensión y maldad.
Noches sin luna ni estrellas.
Fatigas del caminar.

No te rindas al destino.
Sigue buscando, nomás.
Mirando lejos y adentro
un día lo has de encontrar.

Por caminos solitarios
yo me puse a caminar.
Por fuera nada buscaba,
pero por dentro… quizá."